El derrame e ignición de un depósito con alquitrán en una bodega ubicada al interior de la propiedad ded Colón 671, desató un incendio que provocó alarma en La Serena.
El fuego consumió instalaciones ubicadas en el fondo de un patio interior casi en el centro mismo de la manzana, dificultando las faenas destinadas a apagarlo.
Según antecedentes de Carabineros, Bomberos y testigos, el incendio se inició pasadas las 10:00 de la mañana, para la empresa que hace la remodelación de Colón, en la cual el Ministerio de Vivienda y Urbanismo está aplicando un proyecto de repavimentación y habilitación de vías segregadas.
Al lugar concurrieron efectivos de las siete compañías de Bomberos, quienes debieron ingresar tanto a la propiedad directamente afectada como a otra por calle Brasil, cuyo patio colinda con la primera.
Así fue como, en menos de una hora, se logró extinguir el fuego, evitando que se propagara a otras bodegas y patio, o peor aun, que afectara a los vecinos.
El inmueble afectado cuenta con cobertizos y oficinas que se arriendan a pequeñas empresas o como estacionamiento a particulares.
A su costado derecho se ubica el edificio de la Jefatura de Zona y el Servicio de Salud de Carabineros, en el cual trabajan más de 200 personas, el que fue desalojado. Hacia la izquierda se encuentran almacenes y pequeñas tiendas, como también la sede regional de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI).
“Al parecer hizo combustión material asfáltico, el cual dio inicio a este incendio, que en este momento generó la evacuación de varias personas, incluyendo la gente nuestra en forma preventiva. Nosotros tenemos nuestro protocolo, no sabemos lo que pueda haber al interior de un incendio; puede haber una materia más combustible y también se tenía información de que había galones de combustible que podían estallar”, informó en el lugar el general Luis Avilés, jefe de la Cuarta Zona de Carabineros.
DAÑOS
Resultaron destruidos por el fuego varias bodega contiguas, así como tres automóviles particulares, una motocicleta y un carro de arrastre. Otros dos vehículos fueron rescatados con daños y dos más lograron salir indemnes.
Iván Espinoza, administrador de la propiedad e integrante de la familia dueña del sitio, informó que uno de los automóviles perdidos pertenecía a una de sus parientes, mientras que el resto a arrendatarios.
Espinoza contó que la empresa contratista planeaba terminar sus faenas el próximo 25 de abril, habiéndolas iniciado en febrero. No obstante, también afirmó que los trabajadores solían usar el material inflamable con descuido, por lo que temía la ocurrencia de un incendio. “Se les dio vuelta. Cuando llegué salía humo negro, vi el alquitrán que se deslizaba como lava hacia el box, y como era madera antigua y seca, ardió. Yo tenía un extintor y traté de apagarlo, pero era mucha la llama. Habían calentado el alquitrán con un galón de gas de 11 kilos; ellos lo dejaban solo a veces y salían a la calle; eran muy confiados, yo tenía que ir a cada rato para allá, porque me daba miedo. Dejaban las cosas muy cerca de las murallas, y como son de madera…». No hay seguros comprometidos.
