El seremi del ramo, Osvaldo Iribarren, indicó que la venta de cabritos en carretera y en majadas no se debería llevar a cabo ya que sanitariamente hay una mala condición en la mantención del producto, porque se estaría vendiendo a temperatura ambiente, que puede llegar a los 25°, 30° y hasta 40°.
Todos los alimentos cárneos se descomponen a temperatura ambiente, lo que en consecuencia, se traduce en un evidente riesgo para la salud de los consumidores.
«Es un riesgo para la salud y es ilegal y, por lo tanto, si conseguimos individualizar una venta de cabritos en las condiciones de majada o venta callejera sin condiciones tenemos la facultad para hacer el decomiso e iniciar un sumario sanitario, hecho que a lo largo de los años hemos realizado en innumerables oportunidades».
Apuntó que si bien están al tanto de esta venta en majadas y en las carreteras de la región hasta la fecha no se ha producido ninguna denuncia al respecto, pero que si llegan los datos, «hacemos el decomiso e iniciaremos el sumario sanitario».