
El Museo Gabriel González Videla será el escenario de una excepcional recuperación histórica. Este jueves 4 de diciembre, a las 12:00 horas, se inaugurará la exposición «Luz, mineral y memoria», una muestra que trae a la luz más de 200 placas fotográficas de vidrio con imágenes inéditas del mineral de El Tofo (La Higuera) y su comunidad entre 1925 y 1936.
La muestra se basa en un hallazgo fortuito en Europa. El historiador público Javier Rojas relató que la colección pertenecía a Johann Baptista Altermatt, un ingeniero eléctrico suizo que trabajó en la faena. El material fue encontrado en 2023 por el anticuario Martín Osterwalder dentro de un baúl que llevaba el sello del Puerto de Valparaíso, permaneciendo inadvertido por casi un siglo.
Rojas, quien destacó que «todo lo relacionado con El Tofo siempre tiene algo de especial» debido a las romerías y la memoria de sus ex habitantes, enfatizó el valor de las imágenes.
A diferencia de las colecciones industriales, las tomas de Altermatt no son de un aficionado, sino un registro depurado de la vida diaria y la coexistencia social.
«El valor que tiene esta foto es que son del día a día, de las personas, y sobre todo del personal chileno, los trabajadores, la faena diaria, del viaje en el tren y de la convivencia con los extranjeros», indicó el experto.
El baúl, además de las placas, contenía efectos personales como espuelas de plata y galvanos que sus compañeros de trabajo le regalaron al dejar el país.
Las imágenes capturan un campamento minero único, descrito por Rojas como un «microclima muy especial» por sus condiciones de vida. La comunidad contaba con luz eléctrica, agua potable tratada, acceso a salud y educación, clubes sociales y cine.
Además, El Tofo fue pionero en innovación. El complejo poseía el primer ferrocarril eléctrico industrial de Sudamérica, utilizando un sistema de dínamo que permitía que la energía generada por el tren al bajar se reutilizara para el tren que subía, un proceso que era «sustentable» para la época.
La trascendencia de la faena era global: Rojas señaló que existe documentación que vincula el hierro del mineral —por ser la faena de mejor ley del mundo por años— con la construcción de hitos de la ingeniería mundial en Estados Unidos como el Empire State y el puente Golden Gate.
El historiador, motivado por las frases de sus propios familiares que recordaban el Tofo como «nuestros mejores años» y por la urgencia de preservar la memoria de una generación que está desapareciendo, insistió en la necesidad de esta exposición.
La historia de la familia Altermatt es un testimonio de ese profundo arraigo: el ingeniero tuvo dos hijos que nacieron en el hospital de El Tofo, siendo «tofinos-suizos».
Como prueba de ese lazo perpetuo, se encontró que el hijo de Altermatt, al ingresar a una logia masónica en Suiza, eligió el denominativo «Tofo», inmortalizando las raíces familiares forjadas en el campamento minero de Coquimbo.






























