
Una plataforma de inteligencia artificial diseñó un tremendo recinto para el barbón con casi 60 mil almas que pudiesen ingresar
Sede de importantes competencias nacionales e internacionales, se someterá a un proceso integral de modernización de su sistema de iluminación. El proyecto contempla una inversión cercana a los 960 millones de pesos, financiados por el municipio de Coquimbo.
La iniciativa responde a la necesidad urgente de reemplazar los 130 focos de alumetálico existentes, tecnología que ya no se fabrica ni se encuentra disponible en el mercado, generando frecuentes fallas en las líneas de fase y una alta contaminación lumínica.
El nuevo sistema incorporará 170 focos LED de última generación, con mayor potencia, mejor rendimiento lumínico y eficiencia energética, además de un sistema de encendido y control electrónico moderno que permitirá reducir el consumo sin afectar la calidad de la iluminación.
Que duda cabe una verdadera fortaleza tras la reciente campaña de Coquimbo Unido en la que se coronó campeón por primera vez en la historia del fútbol chileno, el estadio Francisco Sánchez Rumoroso se ha erigido como uno de los recintos más emblemáticos del país.
Remodelado completamente en 2008 bajo el gobierno de la entonces Presidenta Michelle Bachelet, el reducto coquimbano fue sede del Mundial Femenino Sub-20 que se disputó aquel año en el país.
Ahora según indicó Balavip, con la ayuda de la inteligencia artificial, el conocido ‘Coloso del Llano’ se sometió a una espectacular remodelación. El recinto duplicó su envergadura, integrando tres bandejas de hormigón que alcanzan una capacidad de 55,000 espectadores, cumpliendo con los estándares de élite exigidos por la Conmebol para finales internacionales.
La identidad pirata define el diseño interior: las dos primeras bandejas lucen un amarillo intenso, mientras que la tercera corona el estadio en color negro.
Tecnológicamente, el estadio incorporó una cubierta perimetral que optimiza la acústica y un sistema de iluminación LED de última generación. Estas mejoras ofrecen un espectáculo visual que posiciona al puerto como un referente de la arquitectura deportiva moderna.
La experiencia se completa con palcos de lujo, accesos de alta velocidad y una visibilidad total desde cualquier sector. Esta modernización equilibra la sobriedad arquitectónica con la realidad del fútbol chileno, garantizando una infraestructura de primer nivel mundial.





























