Una ola de robos y vandalismo ha puesto en jaque la administración del Cementerio Municipal de Las Compañías. La crisis escaló luego de que una vecina denunciara que la tumba de su hijo fue forzada y que incluso sus pertenencias fueron sustraídas, lamentando que «la delincuencia no respeta ni a los fallecidos».
Por Joaquín López Barraza
La gravedad del escenario se acentúa con la confirmación de la sustracción de restos humanos en algunos nichos, lo que ha generado una discusión urgente en el Concejo Municipal.
La preocupación se centra en la infraestructura y la seguridad. El recinto presenta muros perimetrales dañados, en zonas que colindan con campamentos aledaños, y solo cuenta con un cuidador, según denunció el concejal Cristian Marín.
La concejala Luisa Jinete, presidenta de la Comisión de Salud, confirmó que el Secretario General de la Corporación Municipal Gabriel González Videla (encargada del recinto), Marcelo Gutiérrez, ha sido informado de los hechos y que visitó el lugar.
«Lo que yo sé es que hubo robo de, aparentemente, dos cuerpos. Se abordó con el secretario general y él inmediatamente fue a constatar los hechos y a mirar qué podía hacer, porque es algo que no se desconocía que estuviera pasando», declaró Jinete.
No obstante, los concejales cuestionaron la falta de acciones concretas por parte de la administración, que lleva un año en el cargo.
