
El Ministerio de Obras Públicas extendió el plazo de recepción de propuestas técnicas, a petición de las empresas interesadas. La apertura de ofertas económicas también se corrió a fines de octubre, mientras se mantiene la meta de adjudicar la obra en 2026.
Por Joaquín López Barraza
El proceso de concesión de la planta desaladora para la conurbación La Serena–Coquimbo sufrió un nuevo ajuste en su calendario. La Dirección General de Concesiones informó que la recepción de ofertas técnicas, originalmente prevista para el 2 de septiembre, se realizará finalmente el 23 del mismo mes. En paralelo, la apertura de ofertas económicas se postergó del 14 al 24 de octubre.
Según el MOP, la decisión responde a solicitudes de las compañías participantes, que pidieron mayor tiempo para analizar las circulares aclaratorias y preparar sus propuestas. La licitación, que compromete una inversión superior a los 350 millones de dólares, busca garantizar agua potable a más de 600 mil habitantes y contempla una capacidad inicial de 1.200 litros por segundo, ampliable a 3.000.
La obra se emplazará en el sector sur de Coquimbo y es considerada la mayor inversión en infraestructura hídrica en curso para la región. Su adjudicación está prevista para el primer semestre de 2026, con inicio de construcción en el corto plazo y una concesión de 20 años.
En medio de la crisis hídrica prolongada que afecta al norte chico, la desaladora es vista como una pieza clave para la seguridad del suministro, sumándose a los proyectos de embalses y otras iniciativas de eficiencia.
Críticas por la extensión del plazo
Aunque el ajuste fue solicitado por los propios interesados, no todos quedaron conformes con la magnitud de la prórroga. El diputado Víctor Pino (Demócratas), integrante de la Comisión de Recursos Hídricos de la Cámara, consideró que los diez días adicionales son insuficientes.
«Por la envergadura de la obra y la crisis que vivimos, lo mínimo era un mes, de modo de asegurar la participación de los mejores oferentes a nivel mundial y no solo de quienes puedan presentar la propuesta más barata», señaló.
Con el nuevo calendario, las empresas tienen tres semanas más para preparar sus antecedentes. La atención ahora estará puesta en si la ampliación permite atraer a más competidores en un proceso considerado estratégico para enfrentar la sequía estructural que golpea a la Región de Coquimbo.