
Aunque en la región valoran los datos entregados, el seremi de Seguridad Pública, Adio González, reconoce que «no nos deja tranquilos y nos llama a seguir trabajando a través del Consejo Regional Contra el Crimen Organizado…».
Qué duda cabe que el secuestro, un delito del que poco se conocía en Chile hasta hace unos años, ha cobrado relevancia tras experimentar un explosivo aumento desde 2022.
Así lo confirma un informe de la división de estudios de la Fiscalía nacional, divulgado el día de ayer, que muestra que los secuestros han subido en la última década en el país, pasando de 360 casos en 2014 a 868 en 2024.
El análisis fue elaborado por la División de Estudios de la Fiscalía Nacional en el marco del informe Fenómenos Criminales, basado en más de 6.000 casos ingresados entre 2014 y 2024.
En síntesis, el fenómeno registró su punto de inflexión en 2022, luego que la cifra subiera un 68% respecto al año anterior, y en los últimos tres años el número de raptos se ha mantenido por encima de los 800 casos anuales. En 2024 hubo un alza del 2,1% respecto al año anterior. Un 37,8% de estos casos estuvo vinculado con el crimen organizado, unos 10 puntos más que los reportados en 2023.
Aunque hay regiones en que el delito ha ido en aumento, en la región de Coquimbo los números son más favorables, incluso a la baja. En cuanto a secuestros acumulados entre el 2014 y 2024 y la variación porcentual entre 20203 y 2024, la región suma 235 secuestros, con una baja del -23%.
De igual manera es bajo el dato en cuanto a vinculación con el crimen organizado, que llega al 22%, lejos de otras regiones como Arica 33% y Antofagasta 45%.
Al respecto, el seremi de Seguridad Pública, Adio González, señaló que «en el combate contra el crimen organizado que llevamos como Gobierno, es muy importante tener a la mano los datos que permiten tomar mejores decisiones, sobre todo con el fenómeno delictual que es dinámico, por lo que valoramos el reporte del Ministerio Público respecto a delitos como el secuestro».
Esto, porque destaca que en la región «tenemos una disminución de 23% en este tipo de delitos si comparamos los años 2023 y 2024. Pero no nos deja tranquilos y nos llama a seguir trabajando a través del Consejo Regional Contra el Crimen Organizado por el reconocimiento de una problemática persistente y de alta relevancia».
Agrega que «la priorización del consejo que mencionamos se focaliza en el narco-cultivo, que sabemos que es donde tenemos la mayor cantidad de delitos asociados a secuestro, pues entendemos los cambios observados en las dinámicas de estos grupos criminales, que cuentan con una mayor planificación, el uso instrumental de la violencia, disputas de poder e intereses delictivos. Es por ello, que no podemos cesar en la articulación y coordinación de las policías y entidades especializadas que nos permitan seguir disminuyendo este tipo de hechos delictuales».