Este año es trascendental para el Consejo Regional, ya que muchas de sus normas han cambiado, como por ejemplo, la elección de sus miembros por votaciones libres. Pero uno de los desafíos más importantes radica en que la figura del intendente ya no será quien presida la entidad.
Esto plantea la incertidumbre sobre si las nuevas reformas que se quieren hacer al Core le quitarían más protagonismo al cuerpo colegiado o finalmente se contemple un proceso de fortalecimiento en sus atribuciones.
Dentro de los cuestionamientos que se generan al interior del consejo según el Core Raúl Godoy estarían las dudas sobre si los miembros del organismo se remitirán a una labor netamente de aprobación de los proyectos de manera integral o si se encargarán de decidir sólo en el marco presupuestario de estos, atribuyendo la decisión de qué proyectos se discuten en la mesa de la entidad a la intendenta.
Según el consejero Raúl Godoy, el sentimiento de incertidumbre ante la problemática es «transversal», ya que todos los colores políticos dentro del cuerpo colegiado sentirían que es necesario «otorgar más facultades a sus miembros».
