Tras años de análisis y estudios de la compañía canadiense, la primera productora de oro del mundo, sostienen que la iniciativa no es viable a los requerimientos de inversión y sería postergado para más adelante.
Sorpresa causaron la entrega de los resultados operacionales del cuarto trimestre del 2019 de la empresa canadiense Barrick Gold. Esto luego que la multinacional, la mayor productora de oro en el mundo, decidiera -tras años de estudio- actualizar la información geológica del proyecto minero Pascua Lama y catalogarlo como «inviable» en las próximas inversiones de la compañía.
«En el cuarto trimestre de 2019 completamos el estudio y concluimos que no tenemos un plan que cuadre con nuestros criterios de inversión bajo los actuales requerimientos», confirmó la empresa, refiriéndose a la iniciativa de oro y cobre que, de materializarse, se transformaría en el primer proyecto binacional del planeta.
El proyecto Pascua Lama se encuentra en la frontera entre Chile y Argentina, precisamente en la alta cordillera de Los Andes, colindante a las regiones de Atacama y la provincia de San Juan. Específicamente se ubica a unos 4.500 metros sobre el nivel del mar, a 150 kilómetros al suroriente de la ciudad de Vallenar, sobre el límite internacional chileno-argentino, el cual implica la explotación a rajo abierto de un yacimiento de oro, plata y cobre, además del procesamiento de productos derivados de éstos, como el metal doré y el concentrado de cobre.
La información fue publicada en el propio sitio web de la empresa, pero alertada por un medio nacional (La Tercera). De esta forma Barrick Gold reconoce que el proyecto minero Pascua Lama no es viable como está, considerando los «requerimientos actuales» de la firma.
Ello llevó a castigar la inversión del proyecto minero en US$ 296 millones, lo que se agrega a la decisión de descender anteriormente los recursos adosados a la iniciativa por 429 millones en 2018, cuando las autoridades decretaron la clausura del proyecto; y a los 5.500 millones de dólares cuando, en 2013, se paralizaron las obras para optimizar los costos.
En ese contexto, la canadiense ya había suspendido en 2018 los estudios para viabilizar el proyecto, para explotarlo de forma subterránea, previo a la determinación de cancelar la alternativa de solo construir el yacimiento por el lado de Argentina.
«La intención de Barrick Gold ahora es actualizar la información geológica del yacimiento, y este proceso se espera que tome algunos años», apunta el informe, precisando que «el foco para 2020 en Pascua Lama está en identificar y mejorar el conocimiento geometalúrgico del yacimiento. Esto incluye un programas de perforaciones en el depósito Penélope, en Lama».
Recientemente la Corte Suprema había fallado a favor de Pascua Lama, permitiéndole mantener su Resolución de Calificación Ambiental original (RCA), que data de 2006. Pese a que la RCA es de hace 14 años, diversos inconvenientes han mantenido entrampada su construcción e incluso en el Primer Tribunal Ambiental, con sede en Antofagasta, se revisó la causa relacionada con la clausura del proyecto que había decretado en 2018, pero después el máximo tribunal del país lo dejó sin efecto meses después.
Cabe recordar que la corte especializada en justicia ambiental había resuelto, por dos votos a favor y uno en contra, aprobar la sanción de clausura definitiva decretada por la Superintendencia del Medio Ambiente, quien cursó infracciones referidas a la descarga de la salida de canales; la intervención aproximada de un total de 13,832 hectáreas de la especie Azorella Madrepórica, y un total de 2,16 hectáreas de vegas altoandinas por sobre lo autorizado en la RCA, producto de la construcción de ciertas obras del proyecto, tales como, caminos, campamentos, barriales, entre otras.
Además de otras faltas, como la no activación del Plan de Respuesta de calidad de aguas, que implicaba que se le comunicara a la comunidad de las variaciones ocurridas en el río Estrecho; la descarga de aguas de contacto al río Estrecho que no cumplían con los objetivos de calidad de aguas y donde la compañía sólo verificó dos parámetros establecidos, no cumpliendo con lo establecido en la RCA, y otra referida al cumplimiento parcial del compromiso de monitorear los glaciares y glaciaretes emplazados en el área de influencia del proyecto minero.