En la marcha pacífica realizada ayer al mediodía en el centro de Coquimbo, los gremios de la salud reiteraron las demandas que el sector ha levantado como las principales banderas de lucha en el marco de la actual movilización nacional, que dicen relación con mejoras al sistema de salud público, tanto en la atención primaria brindada por los municipios como en la atención en hospitales, promoviendo la mayor asignación de recursos de parte de las municipalidades y del gobierno central, junto con la sentida petición de crear un nueva Constitución política.
«Nosotros tenemos la obligación, como trabajadores de la salud, de responder con una buena atención a los vecinos de Coquimbo, por eso primero repudiamos el actuar de las fuerzas policiales en las marchas, lamentando graves consecuencias para las personas que participaron en las movilizaciones, que provocó lesiones graves en sus ojos y la muerte en nuestra ciudad de un joven vecino, y es así, porque queremos brindar la mejor salud a la gente de la comuna, que le pedimos al alcalde y a los concejales, con una carta que entregamos ahora, tras la marcha, pronunciarse en el tema de resguardar los Derechos Humanos de todos los coquimbanos, dijo el dirigente Manuel Suzarte, de la Atención Primaria de Salud.
Con cifras hizo ver que el aumento presupuestario per cápita debe aumentar en cerca de 40 por ciento, «lo que estamos discutiendo es que el actual sistema de financiamiento per cápita, por paciente, que es el que financia la atención primaria, suba de $6.500 a $10.000 a lo menos, que es lo que exigimos al gobierno central, y ese es el aumento real que se necesita para tener un mejor financiamiento del sistema de salud público. Por eso decimos que para este sistema de salud familiar en la actualidad no tenemos las herramientas para desarrollarlo de buena forma y la única manera es inyectar más recursos económicos derechamente».
Pasando a la situación de la salud municipal, Suzarte recordó que debido a que en ella son atendidas las personas más vulnerables, urge hacer un cambio a la asignación de las partidas presupuestarias de la casa consistorial, emplazando directamente al alcalde Pereira y al concejo para que mejoren el presupuesto de salud 2020, «necesitamos localmente una mejor administración de recursos para salud que nos permitan tener todos los insumos, partiendo por los medicamentos, además de todos los recursos físicos y humanos para atender a la comunidad, porque como siempre hemos dicho, la salude es un derecho que hoy no está consagrado, por eso también estamos peleando por tener una nueva Constitución Política para Chile a través de una asamblea constituyente que si consigne el derecho a una salud gratuita y universal para los chilenos y para todos los habitantes del país».
Respecto a las demandas particulares de Aperbas, el presidente dijo, «en la misma carta que entregamos al alcalde y al concejo pedimos primero que se pronuncien sobre la violencia de la fuerzas policiales y que se termine con el sistema de contrato de honorarios en el municipio, dado que hasta hoy, 11 de noviembre, no se ha podido pagar el sueldo de nuestros compañeros de trabajo, y en el sector salud hablamos de 150 funcionarios, y por eso no es posible que aún se adeuden sueldos».
Duplicar el presupuesto en discusión
Después de escuchar atentamente la petición de más recursos a las autoridades edilicias, el concejal Fernando Viveros, que también participó en la movilización, comentó a Diario LA REGIÓN que respaldará la solicitud.
«Es necesario escuchar la voz de los trabajadores de la salud nuestra y de todo el pueblo, y para eso hay que avanzar en una agenda local, y primero el concejo debe condenar de la forma más enérgica las violaciones a los derechos humanos ocurridas en nuestra comunidad y en la región, con un repudio más concreto, ya que más de 200 chilenos hoy tienen pérdida de visión durante la represión al movimiento social, y en salud hay que decir que estamos discutiendo un presupuesto de $1.500 millones para el 2020 cifra similar a la del 2019, pero también hay que considerar la deuda municipal que solo en salud es de $1.600 millones, que corresponden a $500 millones en fármacos, $500 millones en exámenes y $600 millones de deuda de arrastre, por lo que yo pienso que es crucial aumentar el monto a asignar la doble, a $3.000 millones, considerando que el municipio recibirá $ 60 mil millones de presupuesto total»