Los errores le costaron caro a Coquimbo Unido, equipo que terminó cayendo por 1-2 ayer frente al elenco argentino por la fecha 3 del Grupo H en la Copa Sudamericana. Más de 11 mil almas asistieron al Francisco Sánchez Rumoroso para alentar al barbón, que luchó con todo para equiparar la cuenta en la segunda etapa.

Una fiesta, con hinchadas de ambos equipos presentes en el estadio, sin problemas, sin agresiones, se vivió ayer en el Francisco Sánchez Rumoroso, en el duelo que disputaron por la fecha 3 del Grupo H de la Copa Sudamericana, Coquimbo Unido y Racing de Avellaneda.
Era uno de los encuentros más esperados por los simpatizantes piratas. Algunos, con más años en el cuerpo, recordaban los duelos jugados en 1992 por Copa Libertadores, contra el Newell’s Old Boys dirigido por Marcelo Bielsa y el San Lorenzo que traía en sus filas a Néstor «Pipo» Gorosito y el «Beto» Acosta, porque el ambiente copero se respiraba desde hace días.

Hasta que llegó el pitazo inicial. Como era esperado, Racing asumió el protagonista de ser un grande de Argentina y salió a buscar el partido. Querían marcar rápido, y comenzaron a marcar una enorme diferencia con juego asociado a un toque y mucha progresión por las bandas gracias a Gabriel Rojas y Facundo Mura, que se sumaban a los extremos, Maximiliano Salas y Santiago Solari.

Por eso no sorprendió que a los 10’ la visita se pusiera en ventaja. Y fue aprovechando gruesos errores de coordinación en la defensa coquimbana, junto con una mala salida del meta Diego Sánchez, que capitalizó Santiago Solari para el 0-1.

Después del gol, Racing bajó la intensidad de su juego. Y Coquimbo Unido se fue aproximando poco a poco hasta la portería defendida por Gabriel Arias.

Avisó Sebastián Cabrera con un corner que casi lo clava olímpico, y luego, a los 32’ un remate de Luciano Cabral, probó nuevamente las manos del meta trasandino.

Coquimbo Unido continuó empujando, con fuerza y coraje más que con claridad. Pero esas ganas, lograron generar un error en la defensa de la «academia», que finalizó en un autogol del portero Arias a los 43’.

Parecía que se iban al descanso empatados, pero otro error de los piratas terminó en una falta penal que convirtió en gol Adrián «Maravilla» Martínez a los 45+5’, colocando el 1-2.

BUEN SEGUNDO TIEMPO DEL AURI

Las acciones del segundo tiempo fueron en su mayoría a favor del local. Cabral ganó varias veces a Zucullini y Almendra en el mediocampo, haciendo jugar al equipo.

Dylan Escobar y Juan Cornejo que entró en el complemento fueron importantes agentes ofensivos por las bandas y el partido se comenzó a jugar mucho más en el área de Racing.
A lo 58’ Andrés Chávez anotaba un golazo con un potente remate, logrando el empate coquimbano, pero tras revisión en el VAR el juez central del partido lo anuló por una supuesta mano, cobro que dejó muchas dudas en las huestes aurinegras.

A los 69’ hay otra llegada porteña con un centro de Cornejo al primer palo que Chávez no alcanza a conectar. Pero Racing también tenía lo suyo, porque fiel al estilo de su entrenador Gustavo Costas, cedió terreno para explotar las contras y tuvo dos mano a mano con Johan Carbonero y Baltazar Rodríguez, que tapó muy bien el «Mono» Sánchez.
La última oportunidad de empatar, la tuvo el cuadro pirata a los 90+2’ con un remate cruzado de Alejandro Camargo que se fue apenas desviado.

Así se cerró el partido, que dejó un gusto a poco para los coquimbanos, que vieron como su equipo cayó luchando y siendo competitivo ante un equipo experimentado que sabe como enfrentar instancias internacionales.

Con la derrota, Coquimbo Unido bajó al tercer lugar de la tabla de posiciones del Grupo H, con 3 unidades, mientras Racing sigue como imparable líder con 9 puntos y Red Bull Bragantino llegó a los seis tras vencer a los paraguayos de Sportivo Luqueño que sin unidades están prácticamente eliminados.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingresa tu comentario!
Por favor ingresa tu nombre