
Deté que llevó al pirata a la final ante la Unión Española en 2005 ha seguido la campaña actual desde Santiago y cree que debe pasar algo «muy extraordinario» para que esta vez no levante la copa.
Por Rene Martínez Rojas
Ahora sí que Coquimbo Unido depende de sí mismo para levantar la copa de campeón por primera vez en su historia. Para eso, claro, debe ganar este domingo a La Calera en el estadio Francisco Sánchez Rumoroso.
Y qué duda cabe que será un partido especial para el hincha, tal como ocurrió en 2005, cuando enfrentó en la final del torneo de Apertura a la Unión Española. Aunque aquella vez perdió, la gente aún recuerda ese plantel, compuesto en su mayoría por varios canteranos.
Y quien supo llevar al conjunto aurinegro a esa definición fue el técnico Raúl Toro, hoy alejado de las canchas «por una decisión personal…», cuenta a través del teléfono.
Fueron dos años los que estuvo en el puerto y, como admite, «viviendo felizmente, rodeado de personas que quiero mucho e incluso hasta ahora tengo muchos buenos amigos. Es bonito que la gente de Coquimbo y la ciudad disfrute, pero esto pasa y después hay que seguir el próximo campeonato, que seguramente será mucho más complicado, porque cuando uno sale campeón cualquier equipo le quiere ganar…».
Tiraje a la chimenea
Después de una excelente campaña en San Felipe los dirigentes confiaron en él y cuando llegó, recuerda, una de las pocas cosas que pidió fue que necesitaba -a lo menos- dos semanas para conocer a los jugadores.
Por entonces, Coquimbo había llegado a una semifinal de juveniles, así que había materia prima.
«Empecé a hacer fútbol para conocerlos, pues no tenía otra arma y me di cuenta que había muchos jugadores y muy buenos, ya que estaba Crovetto, Carlitos Carmona, el Piti Lucero, Calderón, García, Aravena, Ali Manouchehri, Osorio, así que había un buen futuro».
Para él, lo clave de esa campaña fue darle tiraje a jugadores de la cantera, quienes se complementaron de buena manera con los más experimentados.
Como anécdota, cuenta que siempre tuvo una tara en su carrera deportiva, «porque yo salí de Unión Española y en mis mejores momentos el entrenador, que era Luis Santibáñez, no me ponía (ríe). Con el tiempo, me dijo: a mí me contratan para ser campeón, no para darle tiraje a la chimenea…Y eso me quedó grabado, así que cuando fui entrenador prometí darle tiraje a los jugadores jóvenes y creo que debo ser uno de los técnicos que más jugadores jóvenes he sacado en los clubes que estuve».
Cuando disputaron la final con el elenco hispano «jugamos con seis Sub 20 y por eso que una de las cosas más gratificantes que tuve en Coquimbo Unido fue justamente haberles dado tiraje a juveniles. Todos esos jugadores se deben sentir muy orgullosos y eso me lo hicieron saber hace poquito, cuando homenajearon a la generación 2005».






























