Homicidio de Ana María Pizarro podría estar relacionado al de María José Zambra, ocurrido en octubre de 2019. Ambos delitos terminaron con el mismo resultado: restos encontrados en distintos sectores de la comuna.
Ana María Pizarro desapareció el 3 de abril, luego de ir a buscar un finiquito pendiente, y sus restos fueron encontrados 17 días después en La Serena, en la Avenida Cuatro Esquinas, entre Avenida El Santo y la Ruta 5 Norte.
Desde entonces, un trabajo investigativo de la PDI con el Ministerio Público, que daría con el paradero del supuesto homicida en cualquier momento, por cuanto estaría identificado.
«Se logró la identificación de la persona y estamos con un grupo exclusivo dedicado para tratar de detener a los responsables del hecho», declaró el inspector Ernesto León, quien lidera las diligencias.
Alerta internacional
Sin embargo, y como dio a conocer T13 este miércoles, el homicidio de Ana María de 56 años estaría relacionado con el crimen, casi en las mismas circunstancias, con el de María José Zambra, ocurrido en octubre de 2019.
Ese día, dos niños que se dirigían por el puente El Libertador, en Las Compañías, a jugar fútbol a las canchas del Complejo Santa Inés, encontraron restos humanos al interior de unas bolsas bajo el puente.
Con las horas y ya la noticia difundida en los medios locales, su familia, que algo intuía, supo que era la joven de 30 años, que había desaparecido sin dejar rastros el jueves 29 de agosto.
El caso desde entonces se ha convertido en un puzzle que aún permanece sin resolver y sin pistas claras que permitan arribar a algún culpable.
Según explica T13, semanas después del hallazgo del cuerpo de Zambra, su teléfono celular, que había desaparecido, fue reactivado.
¿Qué es lo llamativo? Que el chip fue detectado en el dispositivo que usaba Ana María Pizarro.
Consignar que una vez Pizarro fue entrevistada por la policía y confirmó que era dueña de aquel teléfono, pero que lo usaba su pareja.
Precisamente, ese es el mismo hombre que hoy es buscado como principal sospechoso de su asesinato.
Hoy existe una alerta internacional ante una posible fuga del principal sospechoso, aunque tampoco se descarta que existan más involucrados.
«Los antecedentes que puedo comentar hasta ahora es que el delito habría sido cometido por la expareja de la víctima, que es de nacionalidad extranjera, y que se ha levantado una alerta internacional por su eventual abandono del país», señaló el ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero, apuntando a que la medida busca controlar cualquier intento de evasión de la justicia.
