
Las soluciones industrializadas en materia de construcción; casas prefabricadas y modulares han abierto el abanico de opciones en materia de viviendas, logrando mejorar la calidad, productividad, y sustentabilidad en su edificación, así como avanzando en incorporando mejores prácticas, tecnología e innovación en toda su cadena de valor.
Verónica Carmona Aldunate
En eso, los materiales utilizados, costos totales así como el terreno donde se emplazará la obra resultan factores prioritarios a considerar. A su vez, revisar la normativa local y asegurar que el terreno sea adecuado para la instalación de una vivienda prefabricada, considerando accesibilidad y conexiones a servicios es un ámbito específico por el cual se debe obtener una información previa.
«El mercado de las casas prefabricadas va en ascenso. Así lo hemos experimentado con Casas Prefabricadas Premium y nos ha permitido ir optimizando el proceso realizando una asesoría cercana y resolviendo las dudas que nuestros clientes tienen al momento de conocernos. En nuestro caso, nos definimos como Premium por nuestra calidad en los materiales y destacando en eso, nuestros paneles SIP con tecnología Alemana que además permite una mayor garantía de post venta y obviamente mayor satisfacción para nuestros clientes» expresa Manuel Olivares, Gerente Comercial de Casas Prefabricadas Premium.
En esta línea, importante es el aporte que realiza el Consejo de Construcción Industrializada (CCI) organismo que nace como una iniciativa impulsada por el programa Construye 2025 de Corfo, con el fin de promover industrialización como una estrategia que permita apoyar el desarrollo de la industria de la construcción nacional, propiciando su avance en productividad y sustentabilidad.
Rodrigo Araya, empresario regional, Gerente General de Prefabricadas Premium y uno de los directores del CCI dice que «creemos que con esta modalidad de construcción podemos aportar a muchas familias en concretar su sueño. Prefabricadas Premium trabaja actualmente con 15 comités de vivienda en un total de 1.500 viviendas proyectadas y la gran ventaja es que a través de los métodos industrializados podemos producir más rápido y además, en el caso de nuestras viviendas al estar certificadas, se saltan las revisiones y las permisologías y donde se logra un producto de mejor calidad, más eficiente y en menor tiempo» enfatiza Araya.