Después de luchar por una semana por su vida este jueves en la noche dejó de existir en el hospital de Coquimbo Felipe Fernando Linconao Cortés, de 18 años, destacado voleibolista de El Palqui de Monte Patria y alumno del Liceo Eduardo Frei Montalva, que el pasado viernes 21 sufrió politraumatismos después que el auto en el que viajaban desbarrancó y volcó en la zona de Tome Bajo, accidente en el que también pereció su compañero de liceo Luis Araya Campusano, de 17 años y su madre Julia Campusano Farías de 52 años.
El malogrado joven, había pasado a cuarto medio de la especialidad de Gastronomía del Liceo Eduardo Frei, combinando sus actividades académicas con su gran pasión, el volleyball, militando desde temprana edad en el Club Deportivo Akira Kato –Benedicto Kocian de Monte Patria, lo que le valió ser seleccionado comunal de esa disciplina participando en distintos torneos.
Otra faceta destacada de su personalidad era su constante preocupación por su familia encabezada por su madre Rosa Cortés, es así que en este verano estaba trabajando en packings de la zona para reunir dinero para el año escolar, por lo que el día del accidente iba con rumbo a laborar en el predio San Clemente de Tomé Bajo, junto a su amigo y compañero de establecimiento educacional Luis Araya, que pereció junto a su madre que también iba a trabajar con él en el mismo sitio del desbarrancamiento y volcamiento.
Ayer jueves por la tarde, los restos mortales de Felipe Linconao fueron remitidos a El Palqui, para arribar en primera instancia a la casa de su familia de la Villa Jerusalén, para luego ser trasladados a la sede la Junta vecinal Palos Quemados, para el velatorio, mientras que el posterior funeral será realizado en el cementerio de Monte Patria.
El accidente
Según los indicios reunidos por la policía a las 8:00 del pasado viernes 21, Karime Vega Ogalde, de 26 años, que era contratista del fundo San Clemente conducía el auto acompañada de Luis Araya, Julia Campusano y Pablo Carmona Elgueta, de 29 años, todos residentes de distintas poblaciones de El Palqui, pero a la altura de Tomé Bajo, la chofer, por algún motivo, perdió el control del móvil en un área de curvas, saliendo del camino para caer a un barranco de cerca de 90 metros de profundidad.
Julia Campusano y su hijo Luis Araya, murieron en el lugar, mientras que Vega, Carmona y Linconao fueron remitidos al hospital de Ovalle, con politraumatismos y otras heridas motivo por el que Linconao, fue remitido a recibir atención especializada al hospital San Pablo de Coquimbo, donde dejó de existir por las graves lesiones que padeció.
