Su gira «345» lo trajo a la Región de Coquimbo. Confía en visitar justamente las 345 comunas del país dentro de un año y en esa línea, reconoce que «hemos conocido junto al equipo de Acción Republicana cerca de 70 comunas desde mayo a la fecha, siempre con el objetivo de plantearles cuáles son las principales acciones que hemos realizado en los meses que llevamos formalmente constituidos», cuenta el excandidato presidencial y líder del movimiento Acción República, José Antonio Kast.
De sus visitas a las universidades, donde ha tenido más de algún inconveniente, ni hablar. Cada invitación ha sido de los alumnos, «pero hace un tiempo que no las realizamos porque algunas están tomadas o en paro, producto de acciones violentas de algunas agrupaciones y en otros casos, por las vacaciones. Pero en el segundo semestre, si se da la oportunidad, vamos a seguir con eso», aseguró.
¿Por qué optar por un movimiento y no crear un partido político?
«Es un movimiento y no un partido, porque eso nos permite trabajar mucho con parlamentarios de diferentes colores políticos, también con alcaldes y concejales. Hoy existen partidos que están cumpliendo un rol y nosotros queremos basar nuestras energías en defender principios, valores y levantar nuevos liderazgos. No queremos desgastarnos en la conformación de un partido político, sino que queremos desgastarnos en la defensa de las ideas y los principios».
¿Qué simboliza José Antonio Kast que genera tanto nivel de antipatía y odio entre sus opositores?
«Acá existe una izquierda ideologizada que ha identificado en mí a una persona que argumenta y que defiende sus principios en base a la razón y eso atenta contra la ideología. Me identifican como un contradictor veraz y directo de lo que ellos plantean. Ellos ven en eso una amenaza y sobre todo a nivel universitario, donde existe una captura de la izquierda ideológica de las agrupaciones estudiantiles y también de muchas directivas de académicos. Como no ven como contrarrestar las ideas, atacan con violencia».
¿No será que su agenda ultra conservadora incomoda a muchas personas?
«No creo que una agenda conservadora, si le quiere llamar así, pase a llevar a las personas. Yo también me podría ver afectado por una legislación de aborto aprobada en Chile, por ejemplo, pero jamás se me ocurriría insultar o golpear a alguien que haya votado a favor de la ley de aborto, que a mí me genera una situación de mucha angustia. Sin embargo, mi reacción siempre será en base al respeto a la persona, a la defensa de las ideas, pero jamás violentar a alguien que piensa distinto. Y ahí está la diferencia entre la ideología y la razón».
Su sobrino en una entrevista dijo que pensaba muy distinto a usted porque consideraba que tenía ideas que eran retrógradas, teócratas, misógenas y discriminatorias frente a los homosexuales…
«No he tenido la oportunidad de conversar con él. Y tampoco lo había escuchado, puesto que no siempre ando revisando todas las entrevistas o dichos de las distintas personas y tampoco de mi sobrino, aunque claramente tenemos una mirada respecto de la vida y de ciertas cosas muy distintas».
¿Dónde están sus verdaderos adversarios?
«La izquierda ideológica es nuestro principal adversario y ellos nos han identificado como tales, nosotros los invitamos al debate de ideas que es lo que nos caracteriza».
¿Qué opinión le merece el cuestionamiento que ha tenido la Iglesia Católica y en especial con algunos sacerdotes acusados de abusos sexuales?
«Cuando hay delitos y crímenes, hay que sancionarlos como tal, no teniendo ninguna diferencia entre que esté involucrado en este caso un sacerdote o un profesor, o un civil común y corriente. Si hay delitos hay que sancionar y creo que la Iglesia está actuando correctamente en poder entregar todos los antecedentes. No obstante, la persona que haya faltado a la ley, a la moral, tiene que ser sancionado sea civil o canónicamente».
¿Entonces está a favor de revocar la nacionalidad por gracia a monseñor Ricardo Ezzati?
«Eso se enmarca dentro de la politiquería, del populismo barato, que en ese caso trata de utilizar la senadora Ximena Rincón con monseñor Ezzati, quien fue reconocido por su aporte no sólo en distintas áreas, sino que también tiene una historia que avala su otorgamiento de la nacionalidad. Creo que con esto se demuestra la pequeñez política de la senadora, porque acá monseñor no está condenado en un juicio y es algo que ella hace a priori básicamente para aparecer en los medios de comunicación».
Pero si hasta el arzobispo Alejandro Goic criticó en una carta el manejo de Ezzati en los casos de abusos sexuales…
«Primero dejemos que la justicia determine qué es lo que hay, porque cuando uno comienza a hacer suposiciones como esa, al final termina casi en la precondena y en este caso lo que hace Ximena Rincón, especialmente, es tratar de generar un ambiente adverso en contra de monseñor Ezzati para beneficio propio y de su figuración política».
LIBERTAD
CONDICIONAL
La Corte Suprema concedió la libertad condicional a militares represores de la dictadura militar…
«Claro, fueron libertades condicionales otorgadas en base a lo que establece hoy en día la legislación vigente y el requerimiento de Ley 321. Lo que hacen es aplicar la ley y bueno, también aplicaron la ley hace un par de semanas cuando liberaron al asesino del cabo Moyano, que hizo la misma solicitud que las personas que cumplen condena hoy en Punta Peuco. Si usted cumple las condiciones para solicitar la libertad, procede lo que es el recurso de amparo que en este caso, la Corte Suprema procedió a dar curso y está dentro de las atribuciones y de los derechos que tiene un condenado, que es solicitar beneficios cuando cumple los requisitos para hacerlo».
Pero quien mató al cabo Moyano es tan asesino como los militares condenados, ¿o no?
«Fueron condenados por la justicia chilena por delitos graves, unos por asesinatos, otros habrían sido por secuestro. Más allá del delito por lo cual la persona fue sancionado, cumple condena y si dentro del cumplimiento de la condena cumple también los requisitos para recibir beneficios penitenciarios, también lo puede hacer, más allá de la línea política que pueda tener el condenado».
EVALUACIÓN
AL GOBIERNO
¿Cómo evalúa estos primeros cinco meses del gobierno de Sebastián Piñera?
«Lo primero es que hubo un hito en el cambio de gabinete, una reacción al gobierno de lo que ve en las encuestas, pero claramente no va a solucionar los problemas sino recupera la línea por la cual ganó en las últimas elecciones. La gente está expectante de temas económicos, la gente está expectante de que existan soluciones de salud, de lo que se hará en seguridad ciudadana y la verdad, es que la agenda en los últimos meses ha estado más copada por temas que instala la oposición. Acá la gente espera algo distinto al gobierno, así que más que cambio de gabinete, tiene que haber un cambio de actitud y así recuperar la agenda que hizo ganar al gobierno».
A qué se debe la baja en la última encuesta Cadem, ¿a los dichos de sus ministros o por qué las expectativas realmente no se han cumplido?
«Creo que el tema va más por la expectativa. Claramente los dichos del ministro pueden ser desafortunados, pero si el gobierno tiene un potencial en su acción política, ningún dicho de ningún ministro lo tendría que afectar. Creo que las expectativas en emprendimiento, en seguridad ciudadana, en temas de salud, son lo que más golpean al gobierno y eso se puede enmendar con una agenda clara y basada en lo que se planteó en la campaña electoral».
