El servicio está en movilizaciones desde hace una semana y ayer hubo un paro al que adhirió un 70% de los funcionarios en la región, dicen.
Turnos éticos en oficinas de las ciudades de La Serena, Coquimbo, Ovalle, Illapel, Los Vilos y Salamanca, y trámites que competen solo al organismo, se suman a otros problemas como agresiones a los trabajadores.
Hace una semana están en movilizaciones y ayer el Instituto de Previsión Social (IPS) funcionó con turnos éticos. Aperturas parciales de las oficinas en La Serena, Coquimbo, Ovalle, Illapel, Los Vilos y Salamanca, acusaciones de agresiones de los usuarios a los trabajadores -quienes solo realizan trámites que competen al servicio- causaron que un 70% de esos funcionarios en la región de Coquimbo adhirieran a un Paro Nacional la jornada de ayer.
«Son varias las razones que nos llevaron a esta medida radical. Estamos llevando un luto, porque la semana pasada perdimos a tres funcionarios, dos de ellos por covid, en Magallanes y Aysén. Si bien se tiene que esclarecer la causa del contagio, todo indicaría que fue en el ejercicio de sus funciones», adelanta.
Esgrime que otras de las razones se deben a que desde el inicio de esta pandemia se han generado problemas, como la dificultad para cumplir con el estándar de una persona cada 10 metros cuadrados para la atención a público, sumado a que los funcionarios con enfermedades preexistentes no pueden venir, limitando las dotaciones. «Además hay colegas con licencias médicas», agrega.
¿Qué ha hecho la autoridad?
«Ha aumentado los convenios de la Red ChileAtiende y además desea volver a la normalidad lo antes posible. O sea, que extendamos el horario. Si antes estábamos hasta las 14:00 horas, hoy lo hacemos hasta las 15:30 horas. O sea, aparentar normalidad».
¿Y eso no se puede cumplir?
«Nosotros consideramos que no estamos en normalidad, la pandemia no se ha terminado. A esto, para hacer la atención presencial, nos organizamos entre los colegas con nuestros vehículos. Estar hasta las 15:30 implica organizar la colación y es exponernos más».
¿Eso afecta la relación con el usuario?
«Entre las 14:00 horas y 15:30 horas, si bien no hay tanto movimiento, implica que estamos en colación, mientras otros atienden. Eso la gente no lo sabe, y nos agrede verbalmente, y creen que nosotros no queremos trabajar. Esa cuestión a la larga nos está afectando en lo emocional. Nos imposibilita a realizar una atención de calidad».
¿Qué otros problemas presentan?
«Tenemos un convenios en la Red ChileAtiende, que nos permite hacer algunos trámites de otros servicios, además de los nuestros, y ahí han surgido bastantes problemas. La mayor cantidad de gente que se enoja con nosotros, no es por trámites de esta situación precisamente: es por Extranjería y del Ministerio de Desarrollo Social».