
Tras la denuncia de vecinos por el aparente abandono de las casonas céntricas, la Cámara Chilena de la Construcción espera conformar una mesa de trabajo, en conjunto al Servicio Nacional de Patrimonio, mientras que la alcaldesa Daniela Norambuena propone reactivar un plan de emergencia para recuperar este sector patrimonial.
Por: Valentina Echeverría O.
El casco histórico de La Serena, caracterizado por sus casonas coloniales y su valor patrimonial, sigue en el centro de la polémica por su visible deterioro. La semana pasada, la presidenta de la junta de vecinos N°6 alertó sobre el estado de abandono que presentan varias viviendas, algunas de las cuales no han sido intervenidas desde el terremoto del 2029, y que hoy enfrentan daños estructurales que fueron evidentes tras la pasada jornada de lluvia.
A raíz de esa denuncia, otros actores han manifestado su preocupación. Desde la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), su presidente de La Serena, Felipe Paez, propone generar instancias de trabajo colaborativo para abordar el problema. «Nuestro gremio siempre ha sido activo en materias concernientes a la protección y puesta en valor del patrimonio, y en particular, en nuestra Zona Típica de la ciudad, por lo que es preocupante ver el estado actual de este emblemático sector».
El presidente recalcó, que si bien no tienen injerencia directa sobre los inmuebles privados, el gremio puede aportar desde una perspectiva técnica y urbana, acorde a las necesidades de la ciudad. «En 2018 creamos la Comisión de Patrimonio y desde entonces, el objetivo ha sido colaborar de manera asociativa con gestiones ante los organismos encargados de cautelar la preservación de nuestro patrimonio, como el Consejo de Monumentos Nacionales».
Además, se informó que «recientemente nos reunimos con el director regional del Servicio Nacional de Patrimonio y su equipo técnico, con quienes esperamos conformar una mesa de trabajo precisamente para abordar materias transversales y de interés común».
La propuesta del municipio
Desde el municipio, la alcaldesa Daniela Norambuena reconoció el deterioro que presenta el casco histórico y la necesidad de avanzar en soluciones concretas. «Yo creo que es evidente el abandono que tenemos, sobre todo en las casonas más antiguas, donde se han transformado en verdaderas guaridas de delincuentes».
Aseverando que «Eso ha sido por el abandono de los mismos propietarios y también por otros factores, como la alta presencia de adultos mayores, muchos de los cuales han fallecido, sin que se generen las posesiones efectivas».
La jefa comunal también apuntó a las trabas burocráticas que enfrentan los propietarios para mantener o restaurar sus viviendas en la zona típica. «Tenemos un problema grande que se llama Consejo de Monumentos Nacionales. La burocracia es máxima. Para poder arreglar una ventana o una techumbre hay que pedir autorización, no todas las personas tienen recursos para contratar un arquitecto. Además, la respuesta del Consejo es bastante larga».
Frente a este escenario, Norambuena anunció que como propuesta buscará impulsar la reactivación de un plan de emergencia similar al que se aplicó tras el sismo de 2019.
«Quiero levantarlo a través de la oficina de la vivienda y proponer al Serviu un programa especial de recuperación. Además, con apoyo de la Subdere, queremos ampliar el polígono de intervención para recuperar el casco histórico».
Recuperar la historia y la identidad
Si bien algunos sectores han planteado la necesidad de modernizar el casco histórico, la alcaldesa enfatizó que el objetivo es revitalizarlo sin perder su identidad. «Más que modernizarlo, tenemos que relevarlo y mejorarlo. Aquí hay que recuperar nuestro patrimonio».
En esa línea, recordó que se han impulsado acciones para recuperar espacios públicos y reforzar la identidad patrimonial. «Estamos trabajando en la Cámara de Comercio en el proyecto Patrimonio Vivo La Serena, realizando eventos patrimoniales toda la semana, limpiando las calles y mejorando la seguridad. La gente ha notado el cambio y hemos visto un mayor flujo de personas».