
La ruta que conecta La Serena con el Valle de Elqui ha concentrado una inversión inédita en materia de conservación y seguridad vial. El secretario regional ministerial de Obras Públicas, Javier Sandoval, afirmó que «ningún gobierno ha destinado tantos recursos a esta carretera como el actual».
La Ruta CH-41, que une la conurbación La Serena–Coquimbo con las comunas de Vicuña y Paihuano, es considerada un corredor estratégico para la región. No solo sostiene la vida cotidiana de miles de vecinos que la recorren a diario, sino que además es clave para el turismo, el transporte de productos agrícolas y el acceso a localidades rurales del Valle de Elqui. Sin embargo, en la última década también se ha transformado en una de las carreteras con mayores índices de accidentabilidad, lo que ha presionado a las autoridades a acelerar las inversiones.
En ese escenario, el Ministerio de Obras Públicas informó que en los últimos cuatro años se han destinado cerca de $70 mil millones para intervenir distintos tramos de la vía. Se trata de la cifra más alta de los últimos periodos de gestión, según señaló el seremi de Obras Públicas, Javier Sandoval. «En materia de inversión, ningún gobierno ha destinado tantos recursos a esta ruta como el que hoy estamos ejecutando. La CH-41 es prioritaria porque conecta a todo el Valle de Elqui con La Serena y Coquimbo, y su fortalecimiento es clave para la vida cotidiana de miles de personas».
Según explicó Sandoval, las intervenciones fueron priorizadas a partir de los registros de accidentabilidad y del estado de la calzada. «Hemos puesto especial énfasis en los puntos donde la comunidad nos advertía de riesgos permanentes, y donde lamentablemente se habían producido accidentes fatales. El objetivo es reducir esas cifras y dar mayor tranquilidad a quienes transitan a diario», recalcó.
La Ruta CH-41 soporta un flujo estimado de 7 mil vehículos diarios en temporada alta, cifra que se incrementa durante las vacaciones de verano y las festividades religiosas en el Valle de Elqui. La combinación de tránsito de turistas, buses interurbanos, camiones y vehículos particulares genera una fuerte presión sobre la carretera, que fue diseñada con estándares distintos a los que hoy demanda la zona.
Las estadísticas refuerzan esa preocupación. Solo en la última década, la CH-41 ha registrado decenas de accidentes de alta energía, muchos de ellos con víctimas fatales, lo que ha instalado la discusión sobre la necesidad de transformarla en una doble vía.
Proyecciones y futuro de la CH-41
Aunque el monto invertido en los últimos cuatro años marca un hito, la autoridad reconoce que se trata de un paso intermedio hacia una solución mayor. Actualmente se están desarrollando estudios de diseño para la futura habilitación de una doble vía, un proyecto que implicaría una inversión aún más alta y que busca dar un estándar definitivo a una carretera que ha quedado pequeña frente a la demanda actual.
Sandoval subrayó que esa iniciativa aún está en etapa preliminar, pero que los trabajos actuales son indispensables mientras se concreta. «No podemos esperar a que llegue una gran obra para recién actuar. Los vecinos necesitan soluciones inmediatas, y por eso estamos invirtiendo ahora», apuntó.
Por ahora, el foco del Ministerio está en consolidar las obras de seguridad y conservación, de manera que durante 2025 la comunidad ya pueda percibir mejoras tangibles en sus traslados.