No así en la oposición, donde el supuesto llamado del ex diputado a ejercer «presión social» sigue generando críticas. En lo que tiene que ver con el Partido Comunista, el apoyo es irrestricto.
El día jueves, el senador Daniel Núñez aclaró en Diario La Región sus dichos respecto a ejercer «presión social» para aprobar reformas sociales. Pese a que su explicación y profundización en el tema fue bastante decidora y clara en relación a que no estaba mal que existiera un debate político por sus dichos, y, desde luego, que en ningún caso él estaba llamando o incitando a un segundo estallido social con violencia de por medio, los cuestionamientos continuaron desde sectores de la oposición.
Aquello era algo que se podía prever, e incluso algunos encontrones hubo en el parlamento. Sin embargo, pareciera ser que en el oficialismo las aguas comienzan a calmarse. Pese a que ya se habían desmarcado de las declaraciones de Núñez, con la aclaración, la tensión aparentemente bajó.
Ahora bien, respecto al PC y a la supuesta incomodidad que se produjo entre los militantes que tienen una participación activa en La Moneda, la situación también parece haberse superado tras conversaciones a nivel interno. Así las cosas, aunque lo más probable es que al parlamentario PC estos dichos le sigan penando en caso de que se produzca cualquier evento que recuerde al 18-O, las cosas estarían superadas.
Apoyo férreo
Un problema mayor se hubiese generado si el eventual quiebre también hubiese tenido lugar al interior del Partido Comunista, algo que no sucedió, y, si bien hubo quienes optaron por el silencio, la gran mayoría prestó un apoyo férreo al senador.
En la Región de Coquimbo, las diputadas del PC por la zona, Nathalie Castillo y Carolina Tello, respaldaron al senador sin rodeos. Por una parte, Castillo reivindicó los movimientos sociales para conseguir avances, pero no así la violencia. «Ningún gran cambio ha sido impulsado exclusivamente desde la institucionalidad, más allá de la voluntad de avance de nuestro sector y como representantes de izquierda. Los movimientos sociales y de trabajadores son relevantes para empujar las reformas, en especial las torpedeadas por la derecha en el Congreso. Históricamente los movimientos han jugado un rol central», sostuvo.
La también diputada Carolina Tello, ahondó en que es necesaria dejar en claro que las personas pueden manifestarse desde sus diferentes ámbitos. «Es fundamental reconocer y respetar el derecho de la ciudadanía a manifestarse y organizarse, y como diputada, mi papel es canalizar esas demandas hacia acciones concretas en el parlamento. Por mi parte, fui vocera durante el movimiento social, desde las luchas feministas y por los derechos de las mujeres también en ABOFEM, lo cual es mi base de inspiración y referencia para el trabajo parlamentario», refirió Tello.
En lo personal, agregó, me toca articular mayorías parlamentarias para lograr hacer realidad demandas sociales. Esto sobre todo desde la Comisión de Mujeres de la Cámara, donde hemos logrado impulsar proyectos que hoy son una realidad, son leyes vigentes, como la ley de pago efectivo de pensiones de alimentos, la ley de reparación a víctimas de femicidio y sus familias, la ley integral de violencia contra las mujeres, demandas históricas de las mujeres en Chile. Seguiremos impulsando ese trabajo en los temas que aún están en discusión, como el sistema de pensiones y el pacto fiscal».
