Fernando Carvajal, presidente regional del gremio, afirma que es un «tema crónico» que se incrementó aún más con la pandemia. Asegura que no es fácil abordarlo y que darle respuesta en el corto plazo es prácticamente imposible.

Uno de los principales objetivos de cada gobierno es reducir las listas de espera, cada vez más abultadas y que aumentaron con la pandemia. Esto, pues obligó a atender las infecciones provocadas por el Covid-19, provocando una ralentización inédita en el resto de las afecciones.
A la fecha, «un tema crónico», explica Fernando Carvajal, presidente regional del Colegio Médico, y que dice tener varias aristas.
«Porque tiene que ver con las horas de especialistas disponibles, con las horas de pabellón, con las horas de profesionales de apoyo… Entonces no es fácil abordar y darle respuesta en el corto plazo es prácticamente posible. Lo único que se puede hacer es tratar de disminuirlas, pero de eliminarlas es prácticamente imposible», expresa.
Para terminar con las listas de espera advierte que tiene que existir «una producción muy alta para que logre disminuirla», y eso es lo que en la actualidad se ve dificultoso, «porque por un lado está la escasez de profesionales no solo médicos, sino también de equipos de apoyo, y por otro lado están las restricciones presupuestarias que los hospitales tienen y que hacen que a veces la disposición de insumos no sea toda la que se requiere».
A juicio del profesional, la única forma de disminuirla es aumentar la producción. ¿Cómo? «Optimizando el uso de los pabellones o de las consultas en general».

Décadas

En La Serena y Coquimbo, donde se necesitan especialistas, se trabaja en la construcción de sus hospitales y aunque estará la infraestructura, la gran duda que existe, se pregunta el médico pediatra, es saber «si vamos a tener el personal capacitado, por cuanto más tiene que ver con la brecha de especialistas y subespecialistas, además de profesionales de apoyo que tengan especializado. Por lo tanto, se espera que, al tener más infraestructura y equipamiento, sea más fácil abordarlo. Pero el punto crítico va a ser la disponibilidad de recursos humanos calificados».
Son décadas sin poder resolverlo e incluso se han realizado esfuerzos en términos de aumentar las dotaciones y la lista de especialistas, «pero también crece la población, las necesidades y la cosa se hace más compleja. Y se agravó por la pandemia, porque prácticamente durante un año -si bien había disponibilidad- aumentó la demanda y las camas se ocuparon para resolver el COVID, y, por lo tanto, inundó la posibilidad».
En ese sentido, reconoce que «si uno piensa que la pandemia terminó, sí en términos de casos graves ha disminuido fuertemente, pero estamos viendo ahora las consecuencias de esa pandemia que son tanto o más graves, porque efectivamente la cantidad de pacientes acumulados es enorme».

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingresa tu comentario!
Por favor ingresa tu nombre