Su hermano José Gómez, además, llama a la gente a que recen por la vida de César Godoy, quien el lunes impactó contra un camión en La Serena tras recibir un disparo en la cabeza. Aseguran que el hombre «no estaba metido en nada raro» y atribuyen el ataque al error de un delincuente o alguna discusión que hubiese tenido ese día con sus pasajeros, ya que cuando no estaba en su trabajo en la mina, conducía en aplicaciones para hacerse de dinero extra.
La policía continúa investigando qué ocurrió con César Eduardo Godoy Espinoza, chileno de 40 años. Su caso, ha sido uno de los más enigmáticos que han ocurrido en la zona en el último tiempo, que tienen que ver con crímenes de alta connotación social, por lo mismo desde la Brigada de Homicidios de La Serena trabajan incesantemente para esclarecer lo sucedido.
Un fatídico lunes
Fue la tarde del lunes, a eso de las 14:30 horas, en La Serena, específicamente en la Ruta 5 Norte, a altura de la intersección con Juan de Dios Peni, cuando tuvo lugar lo que todos catalogaron como un accidente, incluso anecdótico, por su dinámica. Se trataba de un choque de alta energía, por lo que se podía ver a simple vista, debido a que un vehículo menor quedó con su parte delantera bajo el costado derecho de un camión.
Nadie podía dudar de que el golpe había sido fuerte, pero a través de las redes sociales se burlaban, aludiendo a la poca pericia del conductor del auto. Claro, todavía no sabían lo que había de fondo.
Ni siquiera Carabineros se dio cuenta cuando acudió al lugar de los hechos, y fue recién cuando personal del Samu trasladó al herido al Hospital San Pablo de Coquimbo, que en el Servicio de Urgencia del recinto se percataron que el hombre tenía un impacto de bala en el sector derecho de su cráneo. A contar de ese momento se activaron las alarmas en el Ministerio Público, quien instruyó la concurrencia inmediata de la Brigada de Homicidios de la PDI para que dieran curso a la investigación.
Triste final
de vacaciones
Muchas fueron las teorías tras conocerse que el hombre había sido atacado con un tiro en la cabeza. A través de las redes sociales, la mayoría habló de un ajuste de cuentas, sin embargo, en la familia de la víctima, César Godoy, quien la cierre de esta edición seguía peleando por su vida, descartan de plano esa versión, y es su hermano José Gómez, quien aclara que «todo lo que se ha dicho de César no tiene argumentos».
La víctima trabaja en el rubro minero con un turno 7×7, y el lunes era su último día de vacaciones. Como siempre lo hace estando fuera de la mina, se dedica a conducir con aplicaciones para ganar algo de dinero extra, y en eso se encontraba cuando fue baleado por delincuentes, no se sabe en qué circunstancias.
Había salido temprano desde la casa en la que vive en Las Compañías junto a sus padres. Tomó desayuno, se subió a su vehículo y partió a trabajar. Hasta ahí todo normal.
No estaría «haciendo carreras» hasta muy tarde, ya que tenía la intención de ver a sus hijos ese día, quienes no viven con él desde que se separó de su ex pareja, por lo que no quería desaprovechar la oportunidad de despedirse. Sin embargo, el destino diría otra cosa y no podría decirles que los amaba antes de volver a la mina, debido a las terribles circunstancias que llevaron a Cesar a estar ahora batallando contra la muerte.
¿Qué ocurrió?
Consultado respecto a lo que ocurrió y quién le disparó a su hermano con ánimo de darle muerte, José Gómez es prudente, pero descarta que haya tenido que ver con algo delictual que involucrara a César. «Mi hermano es y siempre ha sido una persona de bien. Ni siquiera tiene antecedentes, ni nada por el estilo. La PDI no nos ha dicho nada, pero a mí se me ocurren algunas cosas, como que haya tenido algún problema con algún pasajero o, no sé, también hay otra tesis que como familia recordamos de inmediato cuando pasó esto», afirma Gómez.
Resulta que muy cerca de donde vive Cesar, según José Gómez, habría un automóvil muy parecido al del conductor baleado, el que ya había sufrido producto del accionar delictual, y por presuntos problemas que tendría el dueño de ese vehículo. «A mí se me viene a la mente también el que a mi hermano lo hayan confundido y le hayan disparado pensando que se trataba de esta otra persona. No lo sé, me cuesta procesar todavía lo que está pasando y lo único que quiero es que César se mejore», relata su hermano, quien, al igual que toda la familia, está esperanzado en que pueda salvarse y que vuelva a ser el de siempre.
