Hoy en el Juzgado de Garantía la Fiscalía de Coquimbo reformalizará en la investigación a B.A.A.A., de 14 años, E.G.B.P., 17, Y.A.R.F., 17, O.J.B.P., 17, Dixon Saavedra Cortés, 20, y a Bastián Díaz Segura, 18, imputados del homicidio del Sargento Segundo Hans Knopke Briones y del carabinero Luis Díaz Manríquez, motorista de la Primera Comisaría de La Serena, a los que arrollaron y dieron muerte el 11 de noviembre del año pasado en la Ruta D-43.
La nueva formalización será por el cargo de receptación de una pistola a fogueo y un rifle a postones robados, los que estaban en poder de los imputados y del auto marca Subaru, con el que viajaron a Ovalle, además de un robo frustrado de un auto en esa ciudad y el robo de otro Subaru de color gris que dejaron abandonado durante la fuga que protagonizaron.
Por otra parte el ente persecutor precisó que Bastián Díaz era el chofer del vehículo que impactó a las dos víctimas en la Ruta D-43, frente al cruce Apatitas de Pan de Azúcar, luego de la reconstitución de escena realizada en el mes de febrero pasado.
El fiscal jefe de Coquimbo, Claudio Correa, manifestó que la reformalización permitirá imputar nuevos delitos que pasarán a sumarse a los ya conocidos, “en la audiencia de la fiscalía, en razón de su investigación y los antecedentes recopilados, va a precisar algunos temas. La calificación jurídica y a atribución de hechos a los involucrados se mantiene inalterable”.
Huida mortal
En la primera formalización del 15 de noviembre, la fiscalía presentó como base del proceso e informe policial que indica que el viernes 11 de ese mes, los seis imputados concurrieron a Ovalle en un auto Subaru robado para tratar de robar un vehículo en calle Tamaya, pero al no lograr ese objetivo, fueron a las cercanías de las obras del nuevo hospital local, sitio en donde lograron abrir las puertas y dar partida al motor de un Subaru de color gris para proceder a llevárselo conduciéndolo.
Al ser sorprendidos por Carabineros, la banda huyó en los dos por la Ruta D-43, abandonando a la salida de la ciudad el auto de color gris, escapando en el otro móvil conducido por Bastián Díaz.
Al pasar por Recoleta los fugitivos comenzaron a ser perseguidos por personal policial de La Serena y Coquimbo haciendo caso omiso a las señales de detenerse, incluso Dixon Saavedra amenazó con un arma de fantasía similar a un arma real a los uniformados que repelieron la agresión con disparos.
Pero al llegar al cruce, el auto esquivó por la berma izquierda un bus que fue atravesado en la pista, impactando al retornar al carril al Sargento Knopke y al Carabinero Díaz, los que murieron de forma instantánea por la fuerza del choque.
Por decisión del Tribunal que otorgó 90 días para la investigación, Saavedra y Díaz quedaron con la medida cautelar de prisión preventiva mientras que a los cuatro cómplices menores les fue impuesta la medida cautelar de internación provisoria.