Prioridades post terremoto postergan accionar de cámara hiperbárica del hospital de Coquimbo

El debate sobre la utilización de la cámara hiperbárica con la que cuenta el centro de atención médica es una arista que se reabre otra vez acorde a los hechos ocurridos durante el fin de semana cuando el buzo de Tongoy Jaime Marcelo Zambra Galleguillos, de 42 años, pereció tras sufrir una descompensación cuando laboraba, problema de salud que en un principio fue atribuido al «mal de presión», hasta que los médicos, confirmaron que el deceso fue por dos paros cardiorrespiratorios.
El malogrado trabajador que a la hora del accidente se encontraba trabajando en el sector de «El Sauce» en la comuna de Ovalle, fue derivado en primera instancia a la posta de Tamaya para luego fallecer en dependencias en el hospital de Coquimbo.
«El trabajador llegó muy grave», destacó Ernesto Jorquera, Director del Servicio de Salud de Coquimbo, «y dada su gravedad no sabemos si el resultado podría haber sido diferente», señaló respecto a que si de haber estado en funcionamiento la máquina podría haberle salvado la vida.
Al respecto destacó que han existido diversas causas que han retrasado la implementación de su uso siendo una de ellas las normas para la utilización de las cámaras así como lo acontecido con el terremoto y posterior tsunami de 2015 que los obligó a invertir tiempo y recursos en otras materias.
Aun así, recalcó, desde hace ya un año que mantienen un sumario que esperan finalice próximamente, con el que buscan establecer responsabilidades respecto a este «no uso» del instrumento. Este que no ha sufrido daños sí debe someterse a algunos cambios, manifestó, en cuanto a «los técnicos encontraron que en temas de seguridad sí se debe realizar un chequeo al soporte».
Por su parte Leonardo Carvajal, presidente de la A.G. de Pescadores de Tongoy, destacó que desde hace mucho tiempo están pidiendo que esto se regularice ya que independiente de que este instrumento se pueda usar en casos de emergencia como la ocurrida durante el fin de semana «cada cierto tiempo el buzo tiene que meterse a la cámara para limpiarse. Si no lo hacen quedan con graves enfermedades y es eso lo que queremos evitar».
Al respecto señaló que ya cuentan con la promesa del alcalde electo de Coquimbo para su pronta entrada en funcionamiento, pero aun así destaca que ha sido mucha la espera.
«Cuando hay accidentes hay que llevar a la gente a Valparaíso y eso no puede ser. Pasa mucho tiempo desde que tienen «la pillá de máquina» – que es como le llaman al accidente por descompresión- , aun así esto ya nos tiene hasta un poco vacunados ya», dejando en claro que si bien estos accidentes le parecen «bastante terribles, también hay que ver lo que pasa con los buzos más allá del simple tema de tener la cámara para salvar vidas. Hay quienes quedan con secuelas y viven la vejez de forma terrible. Eso es algo que también nosotros queremos evitar».