En su primer día de libertad provisional, tras negarse a llegar a un acuerdo con la fiscalía y luego de pasar un mes en prisión preventiva, los tres soldados bolivianos pidieron permiso a las autoridades de La Paz para que se les permitiera conocer el mar chileno.
Pasado el mediodía de ayer, los conscriptos José Luis Fernández (18), Augusto Cárdenas (18) y Alex Choque (20) abandonaron la vivienda del diputado Hugo Gutiérrez (PC) para subir al vehículo del cónsul de su país, Raúl Ruiz, y realizar un recorrido por la ciudad. “Descansamos bien, pero sólo un poco”, dijo el soldado Fernández antes de abordar el vehículo diplomático. Los tres imputados vestían de civil, dejando atrás los uniformes de camuflaje con los que fueron detenidos el 25 de enero pasado, por traspasar de forma ilegal la frontera.
Su primera visita fue al sector de La Tirana.
La zona portuaria de Iquique fue su segundo destino, para luego recorrer el sector costero de Cavancha, playa Brava y Huayquique. Sin embargo, durante todo el trayecto -y por orden del cónsul Ruiz- a los militares no se les permitió bajar del automóvil. Tras almorzar en el Consulado boliviano, los soldados volvieron a recorrer la ciudad. Esta vez el destino fue el aeropuerto, para acompañar a su abogado defensor Matías Coll, quien retornó a Santiago. En los próximos días los soldados serían autorizados para conocer la playa.
