La candidata presidencial del Partido Igualdad, Roxana Miranda, visitó La Serena con el principal fin de reunirse con estudiantes de la Universidad de La Serena, además de transmitir sus pretensiones en diversos medios de comunicaciones.
La dirigente de Andha Chile Democrático (deudores habitacionales) está convencida que representa la «lucha social» y el descontento ciudadano, agregando que representa a casi el 90% de la población que son desplazados socialmente.
Señaló que los orígenes de esta candidatura «nacen por primera vez en Chile como un hecho histórico, con una pobladora, una dirigente social, una costurera, que pretenda llegar al sillón presidencial que ellos tanto cuidan. Hoy día hemos llegado a quienes nunca llegan, la gente común y corriente, y ellos son quienes sustentan esta candidatura».
Entre sus propuestas –que apuntan netamente a lo social- figura una nueva Constitución. «Lo que estamos impulsando es una nueva Constitución, una constituyente social. Por ahí se está hablando de una asamblea constituyente y nosotros decimos asamblea constituyente social, la primera no garantiza la participación de la cual nosotros queremos garantizar, que es la inclusión de la gente común y corriente».
Insistió en que «vivir bien para nosotros significa cambiar los cimientos de la sociedad, queremos una sociedad igualitaria, donde no se genere este triste escenario que tenemos, que es un poco parecido a Haití, donde la desigualdad es enorme, donde los ricos se hacen cada vez más ricos y los pobres cada vez más pobres».
«La Roxana no está sola»
La aspirante a la presidencia insiste en que cuenta con amplio respaldo ciudadano y que no está sola en esta candidatura, ya que principalmente cuenta con el respaldo del Partido Igualdad, una colectividad legalizada el año pasado, y que le permitirá inscribirla directamente como candidata a la presidencia.
«Hay un equipo inmenso trabajando detrás, mucha gente que tiene corazón grande, y que van a poner sus conocimientos al servicio de este proceso. Hay ingenieros, hay economistas, hay doctores, la Roxana no está sola (…)».
