Si bien el proyecto de matrimonio igualitario pasó a la Cámara Alta, donde deberá enfrentar su último trámite, esta pareja espera que si José Antonio Kast logra ganar en la segunda vuelta, acepte las reglas del juego. «Es un conservador extremo, pero si se considera un demócrata, no tendría por qué entrar a prohibir cosas que son una necesidad de la población»
Un anuncio que fue celebrado por la comunidad LGBTI del país, pero que, sin embargo, temen un posible boicot en caso de que el próximo Presidente de Chile sea el conservador y derechista, José Antonio Kast, quien ha reiterado que «un matrimonio es entre un hombre y una mujer, pero también soy un demócrata. Por lo tanto, si el parlamento se pronuncia a favor del matrimonio igualitario, va a ser ley».
Claudia y Paula son pareja. Para eso, han tenido que luchar. Y lo siguen haciendo por la custodia de sus hijos, especialmente Claudia.
Hace un tiempo se le presentó una demanda de «divorcio culposo» con causal de homosexualidad, llegando su caso incluso hasta el Tribunal Constitucional, que finalmente falló a favor de ambas.
«Un triunfo y por eso hoy estamos más tranquilas, esperando que el tema con los niños se solucione. Pero seguimos en nuestras peleas en tribunales, pero ya más tranquilas, más seguras, puesto que hay cosas que se han resuelto, algunas situaciones se han zanjado. Queda pendiente mi situación con respecto a mis hijos, ya que afortunadamente la situación de Paula está zanjada», cuenta Claudia.
Para ambas, lo que pueda pasar de aquí en adelante lo dejan al azar. ¿O al Senado? El 19 de diciembre es la segunda vuelta presidencial y el temor en las minorías sexuales se hace notar con la irrupción del candidato del Partido Republicano.
«Hemos leído el programa de José Antonio Kast, hemos leído entrevistas, hemos tratado de poner harta atención con respecto al tema, porque no sólo abarca al matrimonio igualitario, sino que a todas las políticas públicas sociales que él pueda tener en cuanto a las familias.
Y siendo súper objetivas, la lucha que han tenido los grupos minoritarios ha sido desde siempre. La opinión de él es bastante personal y de su lado más conservador, pero tampoco he escuchado que lo vaya a prohibir de alguna manera cuando sea ley, y que tampoco nosotras no podamos seguir con todo lo que se ha conseguido hasta ahora», advierte Claudia.
Y agrega: «Si él fuera el futuro Presidente, pucha, no veo mucha diferencia con todos los otros presidentes que tampoco han planteado ninguna solución. Mientras no plantee una prohibición directa, creo que existe un poco de esperanza en que se pueda seguir trabajando y que pueda ser aprobado en el Senado».
Para Paula, «la independencia que tienen los poderes legislativos, respecto a que todo lo que finalmente se apruebe a nivel parlamentario, tendrá fuerza de ley y aunque esté Kast o quien esté, nada podrán hacer».
A su juicio, opinión que comparte Claudia, «Kast es un conservador extremo, pero si se considera un demócrata, no tendría por qué entrar a prohibir cosas que son una necesidad de la población, temas que hoy están en boga. Tenemos una situación mundial donde este tipo de temas se avanza y si finalmente hay un sentir de la gente y una representatividad a nivel parlamentario de que estos temas se toquen, pero que principalmente se avance, entonces se van a resolver igual».
Insisten en que han leído el programa de Kast para ver qué realmente es lo que plantea, «porque en estas polarizaciones y en esta oportunidad, tenemos una visión bastante extrema de ambos lados. Quizás con Kast se mantendría este estatus quo, pero siempre ha sido difícil para los grupos minoritarios y no solamente para los homosexuales, sino que para todos los grupos que han tenido que luchar», señala Paula.
Sin embargo, creen que se ha entrado «en una especie de paranoia y susto de lo que pueda pasar con una persona que tiene y demuestra tan claramente que para él la única familia que podría existir es el hombre y la mujer. De hecho, en un momento planteó el tema del subsidio para las familias, para los matrimonios, pero cuando se logre aprobar el matrimonio igualitario tendría que entrar este subsidio para todos los matrimonios y debería ser así, no podría ser de otra manera».
Claudia cree que «estamos en un momento en donde estos temas se vuelven más populares, que es querer tener la aprobación popular y eso les asegura –a los parlamentario- su camino futuro. Pero también es importante que estas cosas salgan desde ahí y no dependerá de quién sea el próximo Presidente. Y si no se aprueba en el Senado, que siempre ha sido más conservador, vamos a tener que seguir con esa lucha hasta que salga, hasta que se apruebe…».