La normalización de la venta online en la pandemia y el aumento del desempleo, habrían potenciado el volcamiento de comerciantes no establecidos al formato digital.
En diciembre, la celebración de Navidad marca uno de los hitos más importantes para el comercio, debido al gran flujo de compra de regalos que van desde alimentos y experiencias, hasta tecnología y vestuario. Si antiguamente la principal complicación para el comercio formal eran los vendedores ambulantes, en los últimos años la venta online también se ha convertido en un foco de comercio informal, problemática que se hace más notoria en este tipo de fechas.
Informalidad digital
Junto con comentar que las expectativas de ventas para este año obedecen a un alza similar a la del año pasado en la misma fecha, Alexis Ramírez, presidente de la Cámara de Comercio de Coquimbo, asegura que la problemática de mayor cuidado es el uso del medio digital por parte del comercio informal.
«La gente está prefiriendo mucho comprar y vender a través de esa vía, porque evitan los costos operacionales, no pagan permiso ni emiten boletas, lo que genera problemas en el desarrollo comercial formal», comenta Ramírez.
A su vez, asegura que si bien no existen estudios sobre las pérdidas que pueden significar, según conversaciones con locatarios podrían llegar a un 50%, entendiendo que la informalidad ofrece los mismos productos a menor precio.
«Mientras ellos puedan tener una diferencia de precios del 10, 20, 30% respecto a comprarlo en el comercio establecido, lo prefieren».
En la misma línea, su contraparte serenense, Carlos Orrego, presidente de la Cámara de Comercio de La Serena, aseguró que este fenómeno no solo lleva tiempo, sino que afecta principalmente al sector más vulnerable del comercio. «El comercio ilegal e informal en el mundo digital ha ido proliferando en los últimos años, lo que afecta principalmente a las empresas pequeñas, no así a las que tienen ya una condición privilegiada».
El origen de todo
Fue durante la pandemia que el negocio online tuvo su auge en el país, lo que se convirtió en el caballo de guerra no solo de las empresas que pretendían solventar la complicada situación económica, sino también del ciudadano que se vio, por los mismos motivos, en la necesidad de una nueva fuente de ingresos.
«No todas las empresas estaban preparadas para poder avanzar en el mundo digital y eso es lo que ha generado hoy una problemática mayor, porque todos los que aparecieron en ese momento, lo hicieron en condición de ilegal y hoy tal vez prefieren estar en la ilegalidad antes que pagar impuestos», asegura Orrego.
A su vez, comenta que, en el tiempo más próximo, el desempleo hizo que muchas personas encontraran en la venta digital una alternativa menos riesgosa.
PELIGRO CHINO
Por otro lado, Carlos expresa que esta sería solo una de las aristas, hablando en concreto de sistemas de marketplace, como Mercado Libre, mientras que la de mayor gravedad vendría de parte del comercio extranjero. «Están las otras plataformas chinas, donde las personas también están comprando a través de la vía digital; allí es donde considero que se hace el daño más grande».
Primeras medidas
Si bien este año la problemática seguirá latente sin mayor forma de regulación, desde enero de 2025 comenzará a regir la ley antievasión, que dará al Servicio de Impuestos Internos (SII) mayor capacidad de fiscalización de cuentas bancarias que reciban una cantidad sospechosa de transferencias de distintas personas, ya sean 50 al mes o 100 en 6 meses.
«Las medidas creo que son las adecuadas, pero es muy probable que en el tiempo tengan que ajustarse y hacer otras cosas más, no solamente el control de los movimientos de las cuentas corrientes», valora Orrego.
A su vez, en octubre de 2025 comenzará a regir el cobro de IVA para compras extranjeras en empresas como Shein, Temu y AliExpress, lo que podría suponer un cambio considerable en la realidad comercial de la Navidad de este año con el siguiente.