Ligada al mundo de la cultura, la gestora y emprendedora, militante desde hace 20 años del Partido Socialista, decidió competir para ser concejala por La Serena.
Carmen Zamora Jopia es una reconocida mujer serenense, formada en la Escuela Experimental de Música Jorge Peña Hen y desde su juventud se ha destacado por su liderazgo y colaboración en la comunidad. Militante del Partido Socialista desde hace más de 20 años.
Su permanente actividad profesional, vinculada al desarrollo social de personas y organizaciones, se ha plasmado en numerosas iniciativas desde el sector cultural y educacional que le han llevado a trabajar en entidades nacionales, regionales y comunales, donde se le reconoce por el aporte que ha realizado para el bienestar de las comunidades.
Zamora se licenció con distinción en Educación Musical en la Universidad de La Serena y posteriormente se especializó en Gestión Cultural Comunicaciones y Marketing en las Universidades de Barcelona, de Chile y UNIACC, a lo que sumó hace unos años la formación y perfeccionamiento en Coa-ching, que ha incorporado de manera destacada en su oferta profesional desde su propio emprendimiento.
Relata que gran parte de su trabajo lo ha desarrollado desde el mundo de la cultura, en particular desde la música, «de ahí empiezo a conocer, explorar e incorporar muchas cosas que tienen que vincularse con el mundo de la cultura, y a mi juicio, en cada cosa que he hecho, siempre ha habido una intención, las cosas que he hecho no han sido al azar», señala.
«En el trabajo político, siempre he tenido una postura ante la vida, que tal vez mucha gente no la conoce, en donde hace muchos años estoy vinculada al Partido Socialista, sin embargo no he usado ese espacio para trabajos u otro tipo de situaciones, por lo tanto la gente que me conoce sabe que mis valores son los mismos durante todo el tiempo», agrega.
Consultada por sus objetivos, sostiene que «hay algunos pilares que para mí son muy importantes y que me importan en todo lo que hago, y tiene que ver con la dignidad y justicia social, transparencia y honestidad, y un concepto que para mí es muy simbólico cuando lo aplicamos efectivamente, que es el buen vivir de las personas y las comunidades, que se cruza con muchos ámbitos de los vecinos de La Serena».
En cuanto a lo que su juicio le falta a La Serena, señala que «tenemos que aprovechar todas las bondades que tiene, como las naturales y patrimoniales, vivimos en una ciudad que en general ha sido tranquila, pero sin embargo hay algunas situaciones sociales que ya nos empiezan a afectar, y desde ahí las autoridades que componen la municipalidad debieran intervenir para tener barrios y espacios públicos más integrados, donde pueda convivir la familia».