Ante el actual escenario de escasez hídrica y el posible racionamiento de agua
que podría afectar a los habitantes de la región.
Enfrentar la crisis hídrica y disponer de todos los organismos técnicos del gobierno regional para que, en alianza con los alcaldes y los principales actores que manejan esta materia en la región, se busquen soluciones para evitar que las comunidades rurales y urbanas se queden sin agua, ha sido un desafio que ha llevado la gobernadora regional, Krist Naranjo, siendo su prioridad desde el inicio de la gestión de su mandato.
Naranjo ha liderado reuniones con todos los alcaldes de la provincia del Limarí y de la provincia del Choapa, territorios donde la situación hídrica es más crítica debido a la cantidad de crianceros y agricultores que allí habitan.
Además, en estas reuniones participan organizaciones sociales, la Dirección General de Aguas (DGA), Aguas del Valle, Onemi, Dirección de Obras Hidráulicas (DOH), Juntas de Vigilancia, comités de Agua Potable Rural (APR) y regantes, quienes han dado importantes insumos técnicos a las autoridades.
“Como Gobierno Regional este tema es una prioridad, hoy estamos viviendo momentos muy duros con la sequía, condicionada por el cambio climático y para nosotros es primordial poder organizarnos de mejor forma para llegar a la emergencia que está ahora y que sabemos que se proyectará hasta abril, si las condiciones llegaran a cambiar este año, pero los pronósticos son bastante negativos aún”, señaló la gobernadora regional.
Sobre este trabajo en conjunto, agregó que “la coordinación es inmediata con los alcaldes, con los servicios y también con la población que en este momento está más afectada: APR, agricultores, canalistas. El mensaje hoy día es que debemos trabajar en conjunto, no queremos que la gente se quede sin agua para consumo humano, así que el llamado es a actuar de manera mancomunada y que la gente esté confiada de sus autoridades, porque estamos tratando de hacer lo mejor posible”, aseguró la Gobernadora.
En estos encuentros se han destacado las directrices, prioridades y condiciones del 5% de emergencia del Fondo Nacional de Desarrollo Regional del año 2022, monto que asciende a los $ 3.764 millones.
Según la gobernadora, la ayuda se orienta principalmente en apoyo a grupos focales: población vulnerable al déficit de agua para consumo humano; la población rural más vulnerable, de manera de generar seguridad alimentaria; agricultores de subsistencia y crianceros de ganado caprino estabulado.
“Tenemos que ir bajo dos parámetros, tenemos que llegar a las emergencias reales y complejas, pero también tenemos que proyectarnos en el tiempo y es ahí donde nuestro equipo técnico está realizando un levantamiento más a mediano y largo plazo, en donde vamos a intervenir con un modelo de gestión integrado de cuencas, hoy en día eso está en proceso”, explicó.
Para la distribución del 5% de emergencia se establece que el 4% es definido por votación del Consejo Regional ($ 3.011 millones). El 1% restante es dispuesto por la gobernadora Krist Naranjo.
Los alcaldes tendrán libre disposición para determinar si utilizan los recursos asignados en todas las líneas de intervención propuestas por el Gobierno Regional o seleccionarán solo algunas de ellas, de tal forma, que los recursos se focalicen con la mayor precisión y pertinencia de acuerdo a las necesidades de cada comuna.
La gobernadora ofició a la Ministra de Agricultura, María Emilia Undurraga, para disponer de los recursos económicos que permitan actuar con la rapidez necesaria, ya que según informes de la sanitaria Aguas del Valle y de la DGA, DOH, hay comunas que agotaron sus fuentes de agua (Combarbalá, Illapel) siendo abastecidas desde Salamanca, por ejemplo, temiéndose que exista racionamiento para las comunas de La Serena y Coquimbo si este año las condiciones climáticas persisten con el fenómeno de La Niña”.