Ayer, la Presidenta de la República, Michelle Bachelet y el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, asistieron a la ceremonia que se realizó en honor del cabo segundo de Carabineros, José Cristóbal Barría, quien falleció tras recibir un impacto de bala, propinado por uno de los pasajeros que iba en el vehículo que detuvo para realizar un control de rutina en Cerro Navia.
Si bien la Mandataria no habló con la prensa tras la homilía realizada en la iglesia San Francisco de Borja, el secretario de Estado expresó que «es un momento muy doloroso para el país, para la institución y como gobierno nos hemos hecho parte de la causa, presentando las acciones legales correspondientes, porque queremos que las personas involucradas en este cobarde asesinato tengan las máximas sanciones que la legislación ha articulado para estos casos», indicó.
Además, Peñailillo señaló que, por el momento, «lo más importante es que este caso se investigue con toda la celeridad necesaria y tan relevante, para que las personas involucradas tengan las máximas sanciones que la legislación en Chile tiene estipulada en este tipo de asesinatos cobardes del que somos testigos en el caso del cabo segundo».