Sentada en uno de los sillones de un set vacío en Canal 13, al final de un día de grabaciones de Las Vegas -la próxima teleserie nocturna de la señal-, y envuelta en una parka para capear el sorpresivo día frío, Josefina Montané (24) se acomoda para hablar de su buen año, en que debutó en las telenovelas, y de sus dos proyectos: la producción que está grabando y la segunda parte de Soltera Otra Vez.
«En un principio fue fuerte. La verdad es que estaba bien impactada de todo lo que estaba pasando, no entendía mucho. Ahora estoy mucho más tranquila, relajada y confiada en lo que estoy haciendo», resume la actriz sobre la experiencia del fenómeno en que se convirtió Soltera otra vez a mediados de año, añadiendo que todo se acentuó porque la tomó por sorpresa. «Sabía que a la teleserie le iba a ir bien, porque era buena. Pero no lo que significaba vivir siendo una persona expuesta y reconocida por todo el mundo, y menos siendo ‘la flexible’ (como llamaban a su personaje). Pensé que iba a ser más piolita, como cualquier actor que es reconocido, pero no imaginé que iba a estar en una portada en el diario en calzones. Fue terrible esa época». Ahora, dice, las cosas cambiaron. «Ya lo veo como el cariño de la gente, que te quiere saludar. Y al estar uno un poco más segura, no ando como pollito asustado de que me van a mirar, es más fácil».
Tras ocho meses de trabajo, Las Vegas está a punto de terminar sus grabaciones, en enero, y saldrá al aire durante el primer semestre de 2013. Ahí, Montané interpreta a Camila, una de las hijas de la familia que está al centro de la historia, compuesta por una madre (Francisca Imboden) y sus tres hijas que se hacen cargo de un club nocturno. Ella es la chica rebelde y desconfiada. «Estoy feliz. Me han dado la confianza de darme un papel más potente y con más personalidad, totalmente distinto de Nicole», explica, añadiendo que «estoy agradecida de eso, porque confiaron en mí, en que podía hacerlo bien».