Tres años de trayectoria lleva en la región «Slow Food», entidad nacida en Italia que agrupa a 160 países en oposición al mercado de la comida chatarra teniendo como premisa la venta de productos libres de químicos y en los que los propios productores son quienes los ofrecen.
«En la región está instaurado hace dos años y medio como mercado de la tierra, pero llevamos organización más de tres años», cuenta Bélgica Navea.
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Como somos una región turística, agrega, muchos extranjeros reconocen a la organización, lo que les ha dado buenos dividendos, además de hacerlos conocidos a nivel regional.
Por ello destaca que el recibimiento de la gente les ha sorprendido ya que «la necesidad que existía acá de alimentos limpios era mucho más de lo que nosotros pensábamos, de eso nos dimos cuenta en el camino», por lo que actualmente trabajan con alrededor de 25 productores de ocho comunas entre las que se encuentran Ovalle, Combarbalá, Salamanca, La Higuera, Coquimbo y La Serena, entre otros; siendo frutas y hortalizas frescas, plantas medicinales, almácigos, queso de cabra, queso de vaca, leche de cabra y de vaca, yogures, miel y sus derivados y deshidratados de frutas son parte de los productos que actualmente ofrecen.
Para ponerlos a la venta se reúnen todos los primeros sábados de cada mes en Coquimbo y el primer y tercer viernes de cada mes en La Serena. Este viernes se realizó la feria en la Plaza Millbrae en La Serena y este sábado fue su reunión mensual en la Plaza de La Herradura en Coquimbo.
Los precios son un poco más elevados, pero tienen que ver «más que nada con que nosotros no tenemos intermediarios, hacemos venta directa y trabajamos con precio justo, lo que significa que tiene que cumplir nuestro costo de producción y a su vez dar un buen precio al consumidor».
