Preocupación existe en las autoridades del municipio de La Serena, debido a la masiva llegada de aves cormoranes, más conocidas como «patos yecos» al centro de la ciudad. La especie es considerada como plaga por la Ley de Caza del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) y pueden generar un daño irreparable en los árboles donde se posan.
Las aves se pueden observar en gran número, especialmente durante las mañanas, en el pino ubicado justo frente a la Catedral en la Plaza de Armas y también en otro pino ubicado a un costado a la Dirección Regional del Trabajo en calle Regidor Muñoz.
«Los cormoranes yecos son bastante dañinos con los árboles porque ellos construyen los nidos allí y comienzan a defecar, alimentar a los polluelos y las fecas de estos animales son muy fuerte, muy concentradas y también tapan las hojas de los árboles y comienzan a morir porque no les llega luz. Además, es un exceso de nutriente que le cae al árbol y muchas veces estos terminan muriéndose», indicó a LA REGIÓN Guillermo Luna, académico del Departamento de Biología Marina de la Facultad Ciencias del Mar de la Universidad Católica del Norte.
El experto indicó además que las soluciones para erradicarlos de las zonas urbanas existen, pero deben ser tomadas a la brevedad.
«Esto es relativamente sencillo de solucionar pero se requiere que se tome una decisión pronto. Si los animales estén llegando en este momento a esos árboles, lo que se tiene que hacer y esto ya se ha probado, es una medida que sirve, es que los bomberos vayan y tiren agua al nido. Eso se debe hacer varias veces hasta que los animales dejen de ir a ese lugar porque lo consideran con mucha perturbación y además el agua destruye el nido y limpia el árbol. Esto se han probado aquí mismo en la región hace unos años en la Colina El Pino, con el SAG y con Bomberos hicimos la experiencia en unos eucaliptus y funcionó. Esta es una cuestión que la autoridad tiene que tomar la decisión ahora, porque si los animales se instalan allí será muy difícil erradicarlos», dijo.
PLAGAS
En tanto, el director regional de SAG, Jorge Fernández, afirmó que si bien esa técnica no está contemplada en sus protocolos, sí puede ser estudiada por los especialistas de la entidad.
«Al SAG le compete fiscalizar la Ley de Caza y en ese contexto los «patos yecos» o cormoranes están clasificados como plagas al igual que las palomas y otras aves. El SAG puede dar recomendaciones, como podas de árboles o elementos disuasivos de esa naturaleza. La otra alternativa es que el ciudadano, o en este caso una institución como la municipalidad contrate los servicios de una empresa que está acreditada para la caza o captura de estos individuos. Tenemos un listado de empresas acreditadas para la especie en particular», indicó.
Jesús Parra, director de la Dirección Servicios de la Comunidad, afirmó que el problema ya está siendo abordado para encontrar una pronta solución.
«Pedimos la asesoría del SAG y ahora tenemos un listado de tres empresas locales especialistas en este tipo de situaciones, y que trabajan con sonido. Queremos que ellos puedan venir al lugar a conocer la situación y nos puedan entregar un presupuesto, pero nuestra meta es poder resolver esto a la brevedad, antes que se convierta en un daño para este árbol», precisó.
Guillermo Luna, académico del Departamento de Biología Marina de la Facultad Ciencias del Mar de la Universidad Católica del Norte, indicó además que los Cormoranes «son animales marinos, que no tienen problemas de conservación y no tienen lugares aptos en la costa para nidificar y por eso se van buscando estos lugares altos como ahí en la plaza de La Serena. Una solución más integral para este animal es que se instalen en algún lugar de la costa, definido por el municipio u otra entidad, estructuras en altura que tengan el diseño apropiado, existen los diseños y está en la literatura, para que el animal allí construya el nido y tenga su colonias».
Tienen que destruir sus nidos sí o sí, nada de trasladarlos a otra parte, ya que eso sólo los sigue acostumbrando a hacer sus nidos en zonas urbanas. No creo que la nidificación de estos animales corresponda al desierto, ya que por lo que se ve tienen predilección por los árboles altos introducidos y espacio costero de acantilados sobra en todo el norte del país.