El acoso que fue escalando en agresividad hasta que las autoras de la discriminación golpearon tal que en febrero pasado, Silvana Muñoz, fue atacada hasta quedar inconsciente con lesiones cortantes en la cara y hematomas. Autoras serían una mujer y su hija.
Por lo mismo se tuvo que cambiar de domicilio y ayer, con apoyo legal del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual, Movilh, presentó una querella contra las agresoras en el Juzgado de Garantía de Coquimbo.
Silvana, pequeña comerciante, había llegado a vivir a Tierras Blancas en 2013, tras obtener el subsidio habitacional para familia vulnerable, pero en septiembre del 2015, mientras su hijo de siete años jugaba con niñas fue insultado con epítetos de grueso calibre por S.S. y M.S., acción que fue recordada con gran dolor por la denunciante al momento de concurrir al Juzgado junto al abogado Kenneth Romero.
«Insultaron verbalmente a mi hijo, diciéndole que era un homosexual, porque jugaba con niñas y con unos legos. Me sentí muy impotente y dañada al ver a mi hijo preguntándome el significado de todo lo que le habían dicho. Me he sentido muy triste al no poder explicar lo que está pasando».
Ante esa discriminación, fue a pedir explicaciones a las denunciadas, pero M.S., lejos de responderle, le propinó golpes en el cuerpo al igual que S.S. De aquello dejó denuncia en Carabineros.
Sin embargo S.S.y M.S. siguieron acosándola amenazándola de muerte y que le iban a dar otra golpiza.
La víctima refirió que la situación ha perjudicado sicológicamente a su hijo, el que ha tenido problemas de autoestima con un claro descenso en el rendimiento escolar. Incluso, otra mujer y su hijo también insultaron al pequeño. «Le dijeron que era un mari …, que era una niñita y que había que tener cuidado con él».
Sin embargo la agresión más fuerte ocurrió el pasado 27 de febrero, cuando M.S y S.S ., en su propio local comercial, dejaron con lesiones serias a la denunciante. Dice que le arrojaron agua para propinarle golpes y cortes hasta dejarla inconsciente.
«Defiende ahora a tu hijo ma… y agradece que es agua y no ácido»…
«Una de ellas me empezó a agredir tirándome el pelo. Su madre, en vez de calmarla, también me agredió, me botó al suelo y ambas empezaron a patearme, a cortarme el rostro hasta que me desmayé».
Sobre los alcances de la querella el abogado Romero precisó que se pidieron variadas diligencias, como la citación de las querelladas y de los testigos, con el fin de comprobar los delitos de agresiones y amenazas, con el agravante de estar motivados por la discriminación en razón de la orientación sexual.
Rolando Jiménez, dirigente del Movilh, comentó que la acción judicial busca castigar con todo el rigor de la ley a las imputadas. «Es sobrecogedor y alarmante lo sucedido a Silvana y a su hijo. Las responsables de estos abusos merecen todo el peso de la ley. Ellas han violado los derechos humanos de una madre y, más impactante aún, de un niño. Insisto, de un niño. Es una crueldad extrema, de nula sensibilidad».
