Carta leída por la core Paola Cortés en favor de los funcionarios del GORE, molestó a Naranjo y pidió suspender la instancia, que finalmente siguió después de algunos minutos de tiras y aflojas.
Una carta leída por la consejera Paola Cortés en favor de los funcionarios del Gobierno Regional, esta jornada en una nueva sesión plenaria del CORE, cuando esta se llevaba a cabo con normalidad, causó la molestia de la gobernadora, que amenazó con la suspensión de la instancia, «en un hecho inédito», lamentó el core Cristián Rondanelli.
No han sido fáciles los días para Krist Naranjo, cuestionada por el Consejo y por los funcionarios del GORE, quienes la semana pasada se manifestaron en el frontis y en sus pasillos pidiendo su salida luego que removiera de sus funciones a trabajadores de carrera que tienen una determinada experiencia.
Además, este jueves, y luego de tres intentos fallidos, la Corte Suprema revisará su posible suspensión del cargo por tres meses, además de la rebaja de su sueldo por igual periodo de tiempo, por mal uso de vehículo fiscal.
Cambios arbitrarios
Precisamente, pasadas las 15 horas, los trabajadores harían ingreso al salón Gabriel González Videla para expresar su molestia. Aquello finalmente no ocurrió por una jugada de último minuto de Naranjo. Una llamada y el compromiso de resolver la situación en los siguientes días.
«Sí, me llamó, y más que manifestarnos, íbamos a entregar una carta que hicimos la semana pasada, porque queríamos saber que ella la tuviera», dijo Jacqueline Barahona, miembro del directorio de la Nueva Asociación de Funcionarios del Gobierno Regional.
«Le expliqué el motivo de nuestra manifestación, específicamente por el cambio de los funcionarios de carrera. A nosotros nos preocupan los cambios de profesionales y especialmente de nuestra asociada, que pertenece al departamento jurídico, y que para nosotros es muy complejo y grave ese traslado», apuntó.
Entonces la gobernadora «se comprometió a revisar la situación de la profesional involucrada, toda vez que fuimos a esta reunión como miembros de la Nueva Asociación de Funcionarios. Tomó conocimiento de nuestro malestar por los cambios arbitrarios o apresurados de los profesionales del GORE y que pudiese desistir de la decisión».
En ese sentido, reconoce Barahona que «debemos confiar en la autoridad máxima de nuestro servicio, en cuanto a que vamos a tener una buena decisión. Sin embargo, nos mantenemos alertas a lo que decida».
Respecto a algún plazo, especificó que «iba a revisar esta situación y entendemos que será antes de que salga con sus vacaciones, que es lo que le vamos a pedir. Seguramente en el transcurso de la semana pediremos una audiencia para saber su determinación».
Hay que avanzar
Cuando tocaba el turno del informe del Régimen Interno, la consejera por el Elqui, Paola Cortés, comenzó a leer una carta en apoyo de los funcionarios.
«A pesar de los constantes esfuerzos que ha hecho como ejecutivo de este Gobierno Regional para menoscabar y denostar el rol de los consejeros regionales desde que asumió su cargo con actos antidemocráticos que han demostrado un pobre manejo en términos de hacer política…».
No alcanzó a terminar cuando interrumpida por la gobernadora, quien lamentó que se utilizara ese espacio para otras cosas.
«Si me va a agredir no va a tener la palabra. No voy a permitir que me agreda en la comisión, tiene que omitir esas palabras. No puedo permitir este tipo de críticas. Ya, se suspende la sesión…», dijo.
Posteriormente continuó la sesión, porque los mismos cores le señalaron que «hay temas de la región que deben avanzar», dijo el consejero Rondanelli.
Al respecto, la consejera Tatiana Castillo señaló que «en la carta nos adherimos a los reclamos de los funcionarios del GORE, lo que no le gustó a la gobernadora, considerando que es una agresión a su persona y, por lo tanto, iba a detener la sesión plenaria, con lo que habría generado un trastorno mucho mayor, pues significa dejar detenido un montón de temas que afectan a la región de Coquimbo económicamente y en su desarrollo».
