Luego de la presentación, los CORE por unanimidad, decidieron apoyar el proyecto y lo enviaron a comisión, con lo que se aseguraría su financiamientos. Ante esta situación Roberto Jacob indicó que «la verdad es que estamos muy contentos. Creo que se impuso por sobre todas las cosas el proyecto, es un muy proyecto y es muy bueno para ciudad de La Serena, es una tremenda oportunidad y creo que así lo entendieron el Intendente y los consejeros y nadie dijo en contra de esta posibilidad y, por el contrario, hicieron solo consultas».
Sostuvo que el hecho que pase a comisión «quiere decir que hemos dado un gran paso y existe la posibilidad cierta que nos adjudiquen los fondos». Agregó que «ahora hay que seguir luchando, a seguir los pasos que corresponde y tener la paciencia necesaria. Me voy muy tranquilo y contento porque este tema pasó a comisión y esto significa que el proyecto corre».
Sobre la inversión total que asciende a más de $18 mil millones el municipio, además, está solicitando un préstamo a la Subdere por otros $5 mil millones más, «ya estaríamos casi en 10 mil millones y seguiremos pidiendo recursos, pero nosotros también estamos poniendo recursos propios ($3.000 millones). Pero lo importante es tener el terreno, no sacamos nada con hacer castillo en el aire si no tenemos un lugar donde asentarlo».
Añadió que los dueños de los terrenos, que pertenecen a Falabella y que ante la imposibilidad de construir un supermercado en el lugar, decidió venderle los terrenos a la municipalidad.
Jacob sostuvo que «tenemos un año para pagar en una primera etapa, podemos llegar a 30 meses y hay un compromiso de compraventa, que nos aseguraría tener el terreno y por mientras podemos pagar un arriendo mientras nos conseguimos todo el dinero».
Ante la posibilidad de vender o permutar el actual edificio consistorial el edil fue enfático y argumentó que «no toca, ese edificio será siempre el del alcalde y veremos qué departamentos se quedarán en el edificio, pueden ser entidades que estén preocupadas del patrimonio, de todo lo que sea el casco histórico. Vamos a ver este tema con calma pero, la verdad, lo importante era conseguir los recursos».
Apuntó que en la actualidad las dependencias municipales que funcionan en el edificio municipal en calle Prat están colapsadas. «Estamos hacinados, con muebles en los pasillos y con el consiguiente peligro para la gente, creo que ante una emergencia no creo que seríamos capaces de evacuar como corresponde, también hay que pensar que los trabajadores tienen que desempeñarse en buenas condiciones para dar un buen servicio».
Por su parte Carlos Cortés, Director de Pladeco, afirmó que este déficit de espacio significa que el déficit es cercano a 9.000 mts1, «esto que incluye pasillos, salas de atención y fundamentalmente el tema del trabajo de los funcionarios en los pasillos. Esto nos hace tremendamente vulnerable ante una emergencia. Necesitamos para trabajar de manera óptima y según las normas cerca de 17.000 mts2».