La colectividad logró reunir las firmas necesarias en sólo tres meses y ahora pretenden convertirse en una alternativa con miras a un año eleccionario.
Finalmente, y cumpliendo todos los requisitos legales establecidos por el Servicio Electoral (Servel), el movimiento Acción Humanista ha logrado constituirse como partido político en la Región de Coquimbo.
Desde la colectividad expresaron su satisfacción por este logro, «resaltando el compromiso del partido en su búsqueda por ser una herramienta política que ponga en el centro las necesidades de las comunidades históricamente vulneradas en sus derechos. Resaltando que el partido propicia los valores de la no violencia, el feminismo y el ecologismo social, así como también la promoción de una nueva relación con los animales, reconociéndolos como seres dotados de sensibilidad y conciencia», señalaron.
Dirigencia
En este sentido, Daniela Molina, concejala por La Serena y dirigente de Acción Humanista en la zona, sostuvo que «es un orgullo haber logrado la legalización en tan corto tiempo, un espaldarazo de la ciudadanía, que nos demuestra que el camino y trabajo que venimos haciendo les hace sentido a las personas. Y por supuesto, es un tremendo desafío que tomamos con mucha responsabilidad».
Objetivos
La formalización de Acción Humanista como partido político en la Región de Coquimbo se suma a su objetivo de convertirse en una alternativa política relevante en la zona, buscando generar un cambio efectivo en la gestión pública y la representación ciudadana.
«Para Acción Humanista, la Región de Coquimbo es de suma importancia, ya que representa un paso fundamental en nuestra expansión en el norte del país. Estamos comprometidos con el desarrollo de esta región, y creemos firmemente que nuestro aporte contribuirá a mejorar las condiciones para todas las familias que la habitan», precisó Tomás Hirsch, diputado y presidente de la colectividad.
Con este avance, Acción Humanista se prepara para afrontar nuevos desafíos durante este año electoral tan relevante, «manteniendo su compromiso con los principios que guían su acción política y social».
