El consejero regional Jaime Herrera, presidente de la Comisión Interna del Consejo Regional, Core en reciente nota publicada por un medio escrito local, señaló que tiene dudas de la labor del municipio de Coquimbo, en el proyecto de construcción del nuevo edificio consistorial, como el pago de solo mil millones de pesos de los 5 mil millones que la municipalidad debía aportar para el financiamiento original de la obra, que ahora tiene un costo cercano a los $28 mil millones, y por los acuerdos que tomó con la constructora Sacyr de subdividir la ejecución de la construcción en dos fases entre otras prerrogativas.
Ante ese cuestionamiento el alcalde Marcelo Pereira manifestó a Diario LA REGIÓN que espera el Core, cumpla con su compromiso para concluir la obra, en virtud de su plan de levantar edificios consistoriales nuevos en todas las comunas que lo requieran, agregando que el principal problema por el que no ha avanzado la edificación dice relación con un nuevo contrato propuesto a Sacyr y con el no pago de acreencias para las que el Core ya asignó fondos, lo que según visión son situaciones ajenas al trabajo municipal en el proyecto.
Además Pereira explicó que las deudas dejadas por la administración municipal anterior con Sacyr fue el primer “escollo” que debió resolver para terminar la paralización de trabajos de edificación que comenzó en el 2016 y que concluyó con la reanudación de faenas a fines del año pasado.
“Cuando yo asumí como alcalde asumí una deuda no menor de 2 mil millones de pesos con Sacyr, entonces apenas asumido presenté un proyecto de refinanciamiento ante el Core, dinero que se recibió por ende esas platas ya están pagadas, después de eso vino un trabajo realizado con el Gobierno Regional y con el Intendente de ese tiempo y ahí me percaté que todo estaba en manos de abogados y por eso dejamos que los abogados de nuestro equipo jurídico municipal, trabajaran con los abogados del Gobierno Regional para ponerse de acuerdo con Sacyr para hacer una especie de cambio de contrato”.
¿Ese cambio fue satisfactorio para la constructora?
Lo que ahora Sacyr está aduciendo con molestia, es que hay tres estados de pagos que no se han cancelado, pero nosotros jurídicamente vamos a seguir manteniendo nuestra postura y lo que está pidiendo Sacyr es que le cancelen los estados de pago, en que las platas están por parte del Gobierno Regional que son en total cerca de mil millones de pesos aproximadamente , pero el hecho que se haya realizado un cambio de contrato no altera el contrato madre, porque las obras están realizadas y no son pagos por obras por realizar.
¿Ve falta de voluntad de la empresa y el Gobierno Regional para seguir adelante con la edificación?
Estoy con una sensación amarga, porque desde que asumí como alcalde he peleado mucho por tener nuestro edificio consistorial, pero ahora por ejemplo nos encontramos con una empresa que dice lo siguiente por qué debo firmar un nuevo contrato para que se me paguen las órdenes anteriores y ahora el Gobierno Regional dice que no vamos a pagar hasta que se firme una nuevo contrato, pero mi asesor jurídico con todo su equipo me dice que no es necesario formar un nuevo contrato por una obra ya realizada y así seguimos detenidos por lo que aquí faltan las voluntades políticas, cuando nuestra gente está ilusionada en contar con el edificio para hacer todos sus trámites sumado a que estamos pagando $1.600 millones en arriendo de dependencias.
¿Cuál es el llamado que puede realizar al Core?
Le pido que nos ayude, porque no tengo ninguna duda que la Intendente Lucía Pinto nos va a ayudar porque conversé con ella y está en buen pie para trabajar en conjunto, por eso estamos detenidos porque a mi gusto y porque jurídicamente así se me ha indicado, no es necesario hacer un nuevo contrato para que se pague lo ya realizado y Sacyr, insisto, lo que pide es el pago de obras realizadas y no por las que se van a realizar,
¿Cuál es el plazo en el que podría destrabarse los pagos a la constructora?
Esto tendríamos que resolverlo en el rango de una semana, por lo que yo les manifesté a la Intendenta que tenemos que ver esto rápidamente porque yo mido las consecuencias y no es que defienda a la empresa, porque yo no solo velo por el bienestar de mi comuna y si Sacyr no termina el edificio significaría que se tendría que irse, lo que significa hacer una nueva licitación y eso aumentaría el costo del edificio entre 3 mil a 5 mil millones de pesos, entonces cómo por un problema que a mi gusto es pequeño, estamos estancados en un tema de pago de obra ya realizada, poniendo en peligro el poder terminar la obra y más encima encareciéndola, volviendo a licitar con otra empresa con la que hay que volver a planificar que es lo que se va a construir.
