Falta de stock e incertidumbre por la pandemia genera caída en la venta de autos nuevos

0
824

La Asociación Nacional Automotriz de Chile (ANAC) reconoce que la venta al público de automóviles no tuvo un buen inicio este año.

Esto a pesar de las expectativas de un repunte en el sector para este año. Durante enero, en la región de Coquimbo se vendieron 834 vehículos, que representa un -13,6% comparación al mismo mes del año pasado.

Aunque el sector automotriz había proyectado un repunte en las ventas para 2021, el comienzo no da para festejos, ya que las ventas durante enero cayeron un 22,2% en comparación con 2020, información que desprende del informe mensual de la Asociación Nacional Automotriz de Chile (ANAC), en donde informan que a nivel nacional se vendieron 24.984 unidades nuevas.

En tanto, en la región de Coquimbo se comercializaron 834 unidades nuevas, que representa un -13,5% en comparación con el año pasado.

«Si bien se regularizó el arribo de embarques con vehículos en las últimas semanas de diciembre, se ha evidenciado un importante retraso en los procesos de descarga de estos», indica el informe.

La ANAC explica que el promedio de retraso por cada nave que arriba a San Antonio está en ocho a nueve días, y que a veces pueden llegar a los 12 días. Esto habría generado un embotellamiento en toda la cadena logística de traslado de vehículos, ya que al no poder bajar la carga, los barcos tampoco pueden volver al país de origen.

A ello, la ANAC agrega que el bajo resultado se explica «por el retroceso en el plan Paso a Paso de distintas comunas a nivel nacional, especialmente en la Región Metropolitana y de Valparaíso, impidiendo el funcionamiento del comercio durante los fines de semana».

«Las restricciones de movimiento y los impedimentos al comercio en general afectaron en cierta medida el ánimo de los consumidores durante el pasado mes, redundando en una menor tasa de ventas diarias», añade el informe.

En entrevista con LA REGIÓN, Waldo Álvarez, administrador de Auto Shopping de La Serena, explica que «veníamos con un repunte muy bueno, pero hay varios factores que nos ayudaban, como el 10% de las AFP, que si bien es cierto no alcanzaba para pagar un auto completo, sí servía para el pie».

«Pero en base a la mayor demanda, los vehículos se agotaron y las partidas que llegaban de afuera empezaron a retrasarse hasta en 10 días, y ahora hay muchos vehículos que están en los puertos, sobre todo en San Antonio, que no los han liberado», agrega.

Álvarez comenta que los retrasos han provocado que la gente no esté tan llana a comprar ‘en verde’, haciendo una analogía con los departamentos o casas, «entonces, esa retracción se produce por lo mismo, la gente quiere ver su auto, sentarse y probarlo».

«Hay también un dejo de desconfianza, porque muchas veces esperamos optimista al ministro de Salud, Enrique Paris, y pasa que comunas que deberían ir avanzando, retroceden, y nosotros podemos ser una de ellas», puntualiza.

Y agrega que «por lo que esta incertidumbre hace que la gente no compre, porque se aseguran con lo que tienen y tratan de aguantar lo que viene, y por eso el mercado no ha podido regularse tal como estaba hace 2 años».

El administrador del «mall del automóvil» señala que la caída de las ventas venía de antes, y que incluso partió con el estallido social, «por ejemplo, un dueño de una automotora que compraba 500 autos mensuales, y los quemaron con las protestas, luego ya no traían tantos, sino que lo justo para vender, y entonces llegó la pandemia…», sostiene.

En cuanto a la proyección a que se pueda normalizar el mercado, explica que «en dos o tres meses más va a llegar una partida de autos nuevos, que es para las personas que ya compraron pero todavía no los reciben, los tienen reservados, y con la llegada de nuevos el mercado se empieza a regularizar».

Otro de los efectos que ha tenido el mercado automotriz, es que los vehículos usados han subido considerablemente de precio, «a mayor demanda hay poco producto, entonces sube su valor… y si un vehículo costaba 5 millones ahora lo venden a 7, y el tema es que los están comprando, cosa que no pasaría antes, cuando estaba normalizado el mercado», señala Álvarez.

«Además, respecto a la locomoción colectiva, con todo el respeto que se merecen, la gente ya no prefiere ese medio de transporte, porque no hay distanciamiento espacial, por lo que prefieren invertir en un auto pequeño o familiar que no sea tan caro, ya también con las marcas chinas, con las que antes la gente era media reticente, ahora son grito y plata», concluye.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingresa tu comentario!
Por favor ingresa tu nombre