Un robo, a todas luces muy bien planificado por sus
perpetradores, fue el que concretaron la madrugada del lunes en el centrico negocio de calle Aldunate en Coquimbo.
Ingresaron por un forado de unos 60 cms de diámetro, un círculo casi perfecto. Es una muralla de adobe con algo de cemento, claramente fácil de derrumbar con herrramientas.
La policía reune pistas para identificar a los delincuentes.
Por ahora sólo habrían algunas huellas y la esperanza de
que cámaras de seguridad de negocios y de la municipalidad, ayudaran con sus registros.
Los sujetos desconocidos hicieron un forado en la pared del inmueble colindante a «Carnes Kar». Un muro de adobes que está libre para trabajarlo. Ingresaron al recinto como Pedro por su casa para quedarse con gran parte de la recaudación del fin de semana.
El Laboratorio de Criminalística y la Sección de Investigaciones Policiales de Carabineros trabaja en el hecho. Las cámaras de seguridad habrían identificado a un grupo de hombres que llegaron al lugar a bordo de un automóvil.
Este es sin duda un particular robo -selectivo y estudiado- a una conocida carnicería del centro de Coquimbo.
Los delincuentes reventaron la chapa del edificio vecino, donde se arriendan oficinas, pero hay algunas sin alquiler, libres y desocupadas. Realizaron en el lugar una perforación de magnitud importante para entrar al local comercial.
Fue en horas de la madrugada del lunes cuando unos cuatros sujetos llegaron a la transitada calle, y aprovechándose del toque de queda, cometieron con toda impunidad el delito. Según habría señalado el administrador de la carnicería a personal policial, el robo ascendería a más de 20 millones de pesos.
Personal de la empresa se percató recién la mañana del día lunes de la millonaria sustracción. Fuentes de LA REGIÓN en el sector, aseguran una estudiada planificación en el ilícito, debido a la cifra sustraída y a los tiempos en que habría acontecido el hecho.