A la espera de las instrucciones por parte del Consejo de Monumentos Nacionales para comenzar con la reconstrucción, los ministerios de Vivienda y el de Cultura se coordinarán para analizar las casas dañadas en cascos históricos y sus soluciones respectivas.
Luego del terremoto del pasado 19 de enero, fueron aplicadas 2221 Fichas Básicas de Emergencia (FIBE), por el Ministerio de Desarrollo Social junto con los municipios en la región de Coquimbo. De ese total, el Ministerio de Vivienda identificó que 1.580 viviendas presentaban daño real.
La Ficha Básica de Emergencia (FIBE) tiene por objetivo levantar información más detallada de los grupos familiares, para dar apoyo en la respuesta a la emergencia. Este instrumento es parte del Sistema de Evaluación de Daños y Necesidades, reconocidos por el Estado de Chile para situaciones de emergencias, desastres y catástrofes, y reemplazó a la anterior Encuesta Familiar Única (EFU).
La ficha debe aplicarse toda vez que se presente un evento de carácter na-tural o por actividades humanas que generen daño a las personas o a sus bienes, entendiendo estos últimos como pérdida de los enseres de un hogar o la vivienda de un grupo familiar.
Este cuestionario de-be aplicarse a partir de las primeras horas de ocurrida la emergencia, una vez que hayan operado los procedimientos de resguardo vital de la comunidad. La ficha debe ser aplicada únicamente por entrevistadores capacitados y autorizados por la seremia de Desarrollo Social.
Producto del catastro, en cuanto al tipo de beneficios, para las casas con daños leves se generó una tarjeta para que las familias compren materiales en ferreterías con convenio en el Ministerio del Minvu, de las cuales 203 familias resultaron hábiles para recibir este beneficio, y hasta el momento se ha entregado un 53%.
Respecto a las viviendas con un daño más grande y que requieren reparaciones, se identificó que 820 son susceptibles de recibir subsidios y un 70% ya cuentan con «entidades patrocinantes» o asesorías técnicas para realizar sus proyectos.
Además, 157 casas tienen un daño grave que requiere demolición o un monto mayor para su reposición. En estos casos, ya el 60% cuentan con asesorías y que, en la mayoría de los casos, son los municipios.
Al respecto, Hernán Pizarro, seremi del Minvu, señaló que «durante este año terminaremos el grueso de la reconstrucción por el terremoto del pasado 19 de enero. La meta como Gobierno es terminar el 100% de los casos en un plazo no mayor a 2 años, y en este sentido, estamos impulsando un proceso riguroso, ordenado y eficaz para llevar ayuda a las familias afectadas de la región».
«Además, estamos coordinados con el Ministerio de Cultura para analizar las casas dañadas en cascos históricos y sus soluciones respectivas», agregó Pizarro.
Municipio de La Serena terminó de aplicar fichas FIBE
Jesús Parra, director de la Oficina de Protección Civil del municipio de La Serena, señaló que «nosotros ya cumplimos con la aplicación de las FIBE, fueron cerca de 660, las cuales se enviaron a la seremi de Desarrollo Social, con un informe técnico que realizó la Dirección de Obras Municipales, toda esa información está en poder del Minvu».
«Ellos están trabajando en la aplicación de subsidios y con las personas que están fuera del Casco Histórico se le están entregando las giftcard de acuerdo a los daños producidos en las viviendas» agregó.
El director de la Oficina de Protección Civil sostuvo que al margen de haber realizado las respectivas fichas, siguen trabajando principalmente con el retiro de escombros producto del terremoto o que los mismos vecinos sacan a la calle.
En relación a posibles desestimaciones de daños por parte de algunos propietarios por temor a ser desalojados de sus viviendas, Parra aclaró que «que es muy difícil que las personas sean desalojadas de sus viviendas por algún funcionario de algún ministerio o de la municipalidad, porque los únicos que tienen atribuciones son las sentencias judiciales, y si la gente miente con respecto eso, está muy equivocada».