
El atacante panameño anotó su primer gol con la camiseta aurinegra que significó la apertura del marcador en la victoria de 2-0 que concretaron los piratas anoche en el estadio Francisco Sánchez Rumoroso frente al cuadro rancagüino por la fecha 10 de la Liga de Primera.
Coquimbo Unido la tuvo que luchar para poder vencer por 2-0 ayer en el estadio Francisco Sánchez Rumoroso a O’Higgins de Rancagua, en el marco de la fecha 10 de la Liga de Primera.
El primer tiempo no fue bueno para el local. El elenco dirigido por Francisco Meneghini, tuvo la pelota y generó un circuito de juego en el sector medio que complicó a los piratas.
Afortunadamente para los coquimbanos, O’Higgins nunca logró ser profundo en el último tramo de la cancha, y sucumbió ante la defensa bien parada de los aurinegros.
Por momentos, Coquimbo Unido se tornó demasiado predecible en ataque. Todos los balones que lograban recuperaban en el medio iban desde Palavecino a Benjamín Chandía, que fue el principal agente ofensivo del elenco pirata por la banda izquierda, y ese libreto lo tenía bien aprendido el cuadro visitante.
GOLES Y VICTORIA EN EL COMPLEMENTO
En el segundo tiempo, entraron los mismos jugadores que terminaron cuestionados por su hinchada en la primera etapa, pero con otra actitud.
Y aquello dio frutos de forma inmediata. A los 48’ Palavecino combinó por izquierda con Chandía, este metió un centro cruzado y en el segundo palo arremetió Alejandro Azócar para convertir, pero el tanto fue anulado por posición de adelanto.
A los 52’ como pocas veces había ocurrido en lo que va de torneo, metieron un pase con ventaja a Cecilio Waterman. El delantero panameño sacó a relucir su potencia física y se llevó al central que lo marcaba para definir ante la salida del meta Omar Carabalí para el 1-0.
Locura y euforia se pudo ver en el festejo del atacante que por fin pudo anotar su primer gol con la camiseta aurinegra, sacándose toda la presión de las críticas que llevaba sobre él.
El ingreso de Alejandro Camargo por el lesionado Sebastián Galani ordenó la zona media. Matías Zepeda y el “pelado” le disputaron mucho más el balón a los de Rancagua y les impidieron jugar.
Coquimbo Unido aseguró minutos más tarde el partido a través de una pelota detenida. Corner servido desde la derecha, y en el primer palo la peinó Bruno Cabrera para el 2-0.
La visita no tuvo reacción y terminó jugando con 10 por expulsión del meta Carabalí a los 85’ quien salió del área para infraccionar a Chandía.
En los minutos finales, el DT porteño, Esteban González, armó una línea de 5 para cerrar el partido ante un O’Higgins sin ideas, quedándose con los tres puntos y volviendo al triunfo después de tres fechas.