La falta de iluminación en las calles de Coquimbo es uno de los problemas más graves que ha tenido que sortear la administración Manouchehri desde su arribo al mandato comunal. La noche se torna más oscura en el puerto con un alumbrado público que actualmente se llena de críticas en varios sectores de la ciudad. En ese contexto, la junta de vecinos de Las Lomas del Sauce tomó la iniciativa de adquirir con recursos propios las ampolletas para un barrio azotado por la delincuencia y las fiestas clandestinas.
Además, su representante, la señora Ana Adasme, señaló que la idea también busca asfaltar el camino principal, también financiado por el bolsillo de la gente. «Nosotros sabemos el estado de crisis que vive el municipio y queremos ofrecer esta ayuda», expresó la dirigente.
Manouchehri pidió asesorarse para «no comprar cualquier cosa» y confirmó que la compra de luminarias estaría en lo pronto de anunciarse con una inversión de $ 230 millones de pesos, que vendría a abarcar el 85% de la comuna puerto. El drama estaría en el proceso de licitación, pues las empresas no querrían venderle a la municipalidad ante la mala fama de deudores.
La toma del sector Rinconada del Sauce ha tenido detractores de todos lados, quienes prometen que el sector se llenó de personas de extraña reputación que cometerían diversos delitos ligados al narcotráfico. Por eso la iniciativa habría sido respaldada por la mayoría de los habitantes, quienes estarían dispuestos a gastar de su dinero para solucionar un problema que a priori debería ser resuelto por sus autoridades locales.
Y es que el objetivo que impulsa Adasme «mataría dos pájaros de un tiro»: los caminos de acceso y la iluminación.
«Vengo como representante de la comunidad y solicitamos gestionar el material para el arreglo de un camino como es el acceso principal, que necesita un asfaltado simple», partió arremetiendo la mujer.
El sector mantiene problemas en sus principales accesos. Accidentes varios han ocurrido, como el de un auto que se estrelló contra una casa el año pasado y fue portada de diarios. Todos culpaban a un camino en malas condiciones en aquella oportunidad.
En la actualidad se han hecho intervenciones, sin embargo, la representante de los vecinos juró que el avance ha sido poco y que necesitan un espaldarazo urgente a su iniciativa. «Necesitamos un matapolvo especial para el asfalto, pero para eso se necesita la maquinaria del municipio, que deje listo el camino para echar el polvo. Nosotros como comunidad pagamos, estamos dispuestos a hacer colectas para pagar, conozco la situación de la municipalidad, por eso en todo este tiempo no he hinchado ni molestado al señor alcalde».
La idea, patrocinada por el concejal del PC Camilo Ruiz, quien valoró «esta idea de autogestión», también involucra la iluminación del sector, y es que según el testimonio de la dirigente, el barrio ha presentado riñas entre delincuentes que han ido escalando tras la llegada de la toma de La Rinconada.
«Yo no vengo a presionar acá, porque no corresponde, vengo a ofrecer una ayuda que podemos dar, el problema es tan urgente que tenemos una toma donde se hacen fiestas clandestinas y llega mucho vehículo, droga, prostitución».
Y agregó, «fuimos a las oficinas de aseo y ornato, donde nos dieron el listado de ampolletas para arreglar los focos que están malos, cuestan 28 mil pesos, lo expuse con la comunidad y están dispuestos a comprarlos, pero necesitamos mano de obra para la instalación».
La respuesta del jefe comunal hizo referencia a la falta de maquinarias que sufre el municipio. «Con el tiempo nos topamos con que la mayoría de la flota de maquinaria que teníamos eran arrendadas y las otras estaban averiadas, la mitad en el taller y otras en el desguazadero».
La realidad es triste en el sentido de los bienes que tendría el organismo para abordar esta problemática social. Solo una máquina que arregla los «hoyos» de las calles estaría operativa. La demanda vial es muy grande también en otros sectores, como El Tangue, Tongoy, Guanaqueros, El Panúl y la ruralidad.
«Nosotros tenemos la voluntad de que la máquina intervenga en todos los lugares donde hace falta y donde podamos intervenir, pero en la actualidad no tenemos maquinaria para dar abasto», dijo el alcalde.
Con respecto a la compra de luminarias, Manouchehri pidió a la vecina asesorarse con el equipo municipal debido a que muchas veces se compra material que no es compatible y que después termina en el basurero. El alcalde confirmó que la compra de luminarias estaría en lo pronto de anunciarse ante la aprobación del concejo. El proyecto para darle luz a las calles de Coquimbo contaría con una inversión de 230 millones de pesos, lo que abarcaría el 85% de la comuna puerto.
No obstante, el ex futbolista mencionó lo difícil que ha significado el proceso de licitación, y es que al parecer ninguna empresa ha querido participar de la oferta. «Eso pasa porque el municipio perdió la credibilidad», sentenció el alcalde ante las deudas que arrastra el organismo, autoridad que también le abrió la puerta a la junta de vecinos de Las Lomas para estudiar su proyecto de autogestión.
