Luego de las críticas del dirigente del Terminal Pesquero de Coquimbo y presidente del sindicato Los Delfines, Ricardo Vitaly, sobre una presunta inacción de las autoridades de gobierno para con el tradicional recinto en materias de seguridad, la delegación presidencial respondió a los dardos, enfatizando que el trabajo por recuperar el mítico espacio sigue en pie firme.
La riña ocurrida en la caleta de Coquimbo el pasado jueves 5 de octubre, en medio de la segunda visita presidencial de la administración Boric, aún está lejos de desaparecer. Todo lo contrario, duros embates estarían sufriendo los propios comerciantes de productos del mar, quienes acusaron que la clientela baja de manera notoria semana tras semana.
Y es que no es para menos, los hechos de violencia tienen en jaque a varios.
Un confuso altercado entre dos mujeres locatarias, traspasó a los hijos y quedó la grande. «Se escapó de las manos».
Un hombre abrió fuego contra el supuesto agresor de su hijo, un menor de 16 años. Incluso le disparó a un funcionario de la marina.
En ese contexto, dirigentes acusaron que el Presidente Boric no fue alertado, que trabajadores le habrían avisado a Rubén Quezada, delegado presidencial, sobre lo que estaba sucediendo en el recinto porteño, con altos niveles de inseguridad.
En ese contexto, Quezada afirma que «para el Gobierno, todo el sector en el que se encuentra la Caleta de Coquimbo y cercano a ella, forma parte de uno de los focos de interés para ir recuperando espacios públicos e ir mejorando la calidad de vida».
«Desde fines del año pasado iniciamos un proceso de fiscalizaciones sanitarias y laborales a los foodtruck que se encontraban en el Parque O’Higgins y luego concurrimos junto al municipio al despeje del sector, un desalojo que estaba pendiente desde la administración anterior, y donde hoy ya se encuentra ese espacio recuperado», agregó la autoridad regional
El militante de Convergencia Social, mismo partido del Presidente, aseveró que «el abandono del Mercado del Mar, que iba a ser una solución para la venta de productos del mar, hoy es foco de inseguridad. Hemos visto los esfuerzos de la gestión municipal actual por retomar este proyecto y el trabajo en operativos de seguridad y recuperación junto a Carabineros, lo mismo para viabilizar la que prontamente será la nueva unidad policial en calle Varela».
Ante los dardos sobre una supuesta actitud de abandono de deberes en la Caleta, dando cuenta de hechos de sicariato desencadenados en junio de este año, el doctor es enfático en recalcar que la lucha por recuperar territorios copados por la violencia no ha terminado.
«Respecto a los hechos ocurridos al interior del terminal pesquero hace unos meses, y a raíz de lo conversado con los locatarios y dirigentes, y precisamente para no estigmatizar al sector, la estrategia fue a través de la investigación profesional y silente por parte de PDI, que ya tiene identificados a los involucrados. Algo muy distinto es lo ocurrido durante los últimos días, donde según información policial, una riña entre los mismos locatarios del terminal pesquero, y con presencia de armas, tiene el desenlace por todos conocido y que afortunadamente no dejó víctimas fatales. Frente a esto, el mensaje del Presidente y del gobierno es a que perseguiremos a los responsables, y que quienes tengan armas no podrán estar tranquilos. Para ello seguiremos fortaleciendo nuestras policías y fomentando la recuperación de espacios. Y esperamos la colaboración de las dirigencias y ciudadanía para hacer las denuncias respectivas en caso necesario», sentenció el delegado Rubén Quezada.
