LA ROJA DEL TENIS CONSIGUIÓ EL ASCENSO

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e l mediodía del sábado presentaba la arcilla del Club Palestino con su mejor cara. Las graderías estaban colmadas, superando ampliamente las expectativas por ser una fecha compleja para tener un panorama distinto a una parrilla. Pero el trabajo de los últimos dos años ha sido el aval del batallón que armó Nicolás Massú de cara al desafío del retonro en Copa Davis. Los elegidos del dobles eran el joven Christián Garín y el experimentado Hans Podlipnik, hombre de presente muy bueno, sobre todo en dobles donde se ubica 96º del mundo. Los venezolanos, por su parte, tenían en Ricardo Rodríguez y Luis David Martínez las esperanzas de seguir vivos en la serie. Claro, pues el 2-0 de la jornada anterior mantenía a Chile con el favoritismo aún más sólido que antes del inicio de los partidos. En el primer set comenzaron erráticos los nacionales, ya que Garín cometió muchos errores no forzados, los cuales mermaron las chances de mantener el servicio de su compañero Podlipnik. Pero el «Polaco» nunca dejó de alentar al campeón Junior de Roland Garros, y con el servicio del mismo iquiqueño, dejó atrás los errores e impuso con firmeza los términos del juego de saque. Pero los llaneros no dejaban espacio para más errores y lograron llevar hasta el tie break la primera manga.

Y es allí en donde «H-Pod» y «Gago» estuvieron implacables, dejando en 0 a los visitantes. El segundo capítulo fue igual de parejo, con ambas escuadras a gran nivel, pero con un Chile mucho más certero. Lograron el quiebre en el momento justo y cerraron un 6 a 4 que encaminaba a los también dirigidos por Marcelo Ríos hacia el triunfo. No obstante aquello, los venezolanos complicaban más de la cuenta a Christian y Hans, ya que peleaban cada pelota y cada punto, que la jueza de silla brasileña tuvo que bajar varias veces de su silla. Nuevamente llegaron hasta el desempate, y otra vez el Club Palestino fue parte importante. Seis a cero y rugía la casa del «León», Gonzalo Lama (formado allí), transformando en una caldera impaciente el recinto. Hubo un error en la malla y otro más que desconcentró un tanto a los créditos nacionales. Pero la experiencia de Podlipnik pesó durante toda la serie, y en una recepción cruzada provocó el error de la volea visitante, cerrando el definitorio 7/6 (0); 6/4 y 7/6 (2), en un fin de semana de récords. Fueron 3 triunfos entre viernes y sábado, sin perder ningún set, completando 18 victorias consecutivas. Y por supuesto, marcó el anhelado ascenso hacia la Zona I Americana, la «segunda división» del tenis mundial. «Volvemos a donde debemos estar en este momento. Ni en la Zona II, ni en el Grupo Mundial, hoy tenemos que estar aquí, trabajando arduamente para seguir evolucionando», comentó José Hinzpeter, presidente de la Federación de Tenis nacional. A su vez, el capitán chileno, Nicolás Massú, reconoció que «por ahora hay que disfrutar de este logro, en el cual venimos trabajando desde hace 2 años. Del futuro me pondré a pensar cuando terminen los 5 puntos de esta serie».

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