La propuesta, que fue dada a conocer por militantes de Renovación Nacional luego del fallecimiento del ex Presidente Sebastián Piñera, ha generado división en congresistas de la zona. Mientras unos lo valoran, otros consideran que mejor es descartarlo de plano.
El trágico deceso del ex Presidente Sebastián Piñera, además de todo tipo de semblanzas en torno a la figura de quien fue jefe de Estado durante dos períodos, también reabrió un interesante debate.
Esto luego que desde Renovación Nacional plantearan la idea de restituir, por medio de un proyecto de ley, la figura de la «primera dama», que en forma integral ocupó Cecilia Morel durante los mandatos del fallecido ex mandatario.
Cabe destacar que frente a esta materia, la ex pareja del Presidente Gabriel Boric, Irina Karamanos, aseguró que es «un estilo oportunista el antojo de poner este tema a días de la tragedia. Las sentidas manifestaciones de cariño hacia Cecilia (Morel) son valiosas en sí mismas, sin necesidad de usarlas ni de hacerlas ley», aseguró Karamanos a El Mercurio.
Frente a este tema, que ha sido bastante polémico, hubo valoración de parte de sectores más ligados a la oposición, una crítica dura de parte del oficialismo y una postura intermedia de otros sectores.
OPINIONES MUY DIFERENTES
Frente a esta materia, la diputada Nathalie Castillo (PC) fue severa en su análisis. «Yo le aconsejaría a la derecha que pueda tomar pausa respecto de la lluvia de ideas que nacen a propósito de la muerte y este «legado» del ex Presidente Piñera. El cargo de primera dama no es esencial y en este último año nos hemos podido percatar de aquello, porque las instituciones siguen funcionando. Lo que importa es que la oposición ponga su capacidad intelectual en revisar la reforma a las pensiones, aprobarla y darle mejor calidad de vida a las personas mayores», aseguró.
Una postura completamente distinta es la que planteó el diputado Juan Manuel Fuenzalida (UDI). «La figura de la primera dama es una institución que hay que restablecer y que es un gran apoyo para el Presidente de la República, sobre todo desde la perspectiva social. Por lo tanto, creo que hay que reimpulsar esta institución, que permita en definitiva al hombre o a la mujer que acompañe al mandatario o mandataria, que tenga una función destacada en el gobierno de turno. Creo que es una institución que se debe mantener en el tiempo a pesar de que Irina Karamanos trató de dejarla sin efecto».
Una postura crítica pero dirigido hacia el Gobierno es la que presentó el diputado Víctor Pino (Demócratas), quien aseguró que «la figura de la primera dama ha tenido un rol de servicio público ligado a diversas instituciones y organizaciones que han estado trabajando para dar bienestar a diversos sectores de la población en nuestro país durante años».
Por otra parte, el parlamentario sostuvo que «con la desaparición de esta figura por parte del actual gobierno, se da una clara muestra de la necesidad de quienes gobiernan de querer refundar o prescindir de la figura de la primera dama, que ha sido parte de nuestra tradición republicana. Considero que es importante replantear este tema, además de reponer y dimensionar el lugar que ésta ha tenido en los últimos 30 años. Considero que buscar fórmulas de cambio solo satisfacen al sector político del gobierno de turno», finalizó.
LA ÚLTIMA
Con la llegada de Gabriel Boric al poder, su pareja Irina Karamanos asumió el rol que habitualmente tenía la primera dama, que se centraba en administrar actividades sociales de la presidencia y por eso recibía el nombre de Coordinación Sociocultural de la Presidencia.
Sin embargo, y tal como habían anticipado en la campaña presidencial, la institución fue modificada y, en diciembre de 2022, se oficializó su cierre con la salida de Karamanos.
