Todo el fin de semana junto a los restos de su víctima pasó Roxana Valdés antes de entregarse y confesar el crimen de su pareja, a quien descuartizó y luego hirvió.
Así lo detalló la propia mujer en la declaración que entregó a Carabineros la noche del domingo, cuando llegó hasta unidad policial para dar cuenta del hecho por el que será formalizada.
Según explicó Valdés, el asesinato ocurrió la madrugada del sábado tras una discusión por dinero, el que habría sido sustraído por la víctima, identificada como Claudio Muñoz, con quien convivía hace tres años y tenía un hijo de 8 meses.
Lo anterior generó que la mujer -a quien el Ministerio Público le imputará el delito de parricidio- disparara al pecho de su conviviente con un arma de fuego para luego descuartizar el cadáver y colocar sus restos en una olla de gran tamaño, donde los cocinó por varias horas.
Posterior a ello, puso el cadáver destrozado dentro de bolsas de basura con la intención de deshacerse de él algún sitio en Talca. Sin embargo, de acuerdo a su versión, cuando se encontraba camino a la ciudad se arrepintió y decidió regresar para entregarse a la policía.