Hace tres meses que sus viviendas en el sector de Puertas del Mar retumban cada vez que se arman estas veladas, que duran hasta alta horas de la noche.
De pronto, las casas de los vecinos de Puerta del Mar, en Avenida Francisco de Aguirre, se convirtieron en una especie de explosivo a punto de detonar. El problema son las fiestas en un sitio eriazo que colinda con viviendas particulares, con el campus de la CMP, casi al frente del Inacap, que crecieron hasta un nivel que no pueden controlar y tampoco encuentran solución.
La música y gritos excesivamente altos pueden extenderse hasta altas horas de la noche, «entonces comprenderás que las personas que ahí viven, especialmente los niños, no duermen absolutamente nada», se queja Edward Conley Candia, presidente de la Junta de Vecinos Puerta del Mar.
El terreno en cuestión ha sido utilizado por un tercero que subarrendó al dueño original para la realización de distintos eventos.
«En un momento fueron fiestas de reggaetón, convocatorias tuning y distintas jornadas que han provocado problemas en el sector, y no solamente por el tema del ruido y la convocatoria, sino porque son las cinco de la mañana y las carreras, el escándalo y el volumen de los eventos sobrepasa lo autorizado».
Explica que cuando ocurrió el evento de la semana antes pasada, «se lo hicimos saber al delegado presidencial y a distintas autoridades del municipio, si es que se contaba con las autorizaciones para desarrollar estos eventos, y la municipalidad dijo que no había emitido ninguna patente para esa jornada. También le preguntamos al delegado y dijo que tampoco iba a autorizar nada. Entonces nos quedamos tranquilos pensando en que no se repetirían las fiestas, pero lamentablemente no fue así, ya que nuevamente se hizo una nueva convocatoria con distintos grupos de reggaetón y hasta altas horas de la madrugada. O sea, la molestia es no solamente por el ruido, sino porque ha habido asaltos, delincuencia, y vemos con recurrencia que el municipio se queja que El Faro amanece sucio con basura, y justamente coincide con estas jornadas».
No saben quién autoriza
Estas fiestas llevan cerca de tres meses, y de hecho, en el verano se desarrolló la Fiesta de la Cerveza y estuvo la carpa del Bombo Fica, «pero como una vez lo planteé en el concejo, el problema no es la realización del evento, pues entendemos que el derecho al esparcimiento es válido, el tema son los horarios, el volumen y las constancias de los eventos, ya que no puedes hacer un carrete todos los fines de semana hasta las seis de la mañana y con parlantes que están a un lado de las viviendas. De verdad que me parece extraño que se autoricen estos eventos en desmedro no solamente de la infraestructura pública, sino también por el bienestar de mis vecinos».
Edward Conley reconoce que hasta el momento no ha revisado la documentación que autoriza estos eventos y que por eso no le consta quién es el firmante.
«Pero sí sabemos que el permiso es de la delegación, pero no sabemos si lo firmó en su momento el delegado anterior o el actual. Lo que corresponde es hacer lo que en su momento ofreció el delegado, sobre todo hoy (ayer) en el concejo municipal, que es juntarnos, poner sobre la mesa los antecedentes y saber lo que está pasando. ¿Sabe? Hay eventos coordinados para el mes de mayo (día 8) entonces cuando al alcalde dice en concejo que se preocupará de ver que estos eventos no sigan ocurriendo, al ratito nos llega un ‘flayer’ anunciando que en mayo vienen grupos de cumbias, entonces como que algo no nos cuadra», reclama.
Aunque avisa que estas fiestas no se hacen todas las semanas, si como vecinos están indignados, porque «las últimas tres fueron en dos fines de semana seguidos (sábado, domingo y sábado)».
