Controversia ha generado el impuesto a los alcoholes que incluye la reforma tributaria, especialmente en lo que se refiere al pisco, ya que se considera aumentar de un 25% a un 35,5%, debido a la alta graduación que contiene.
Los pisqueros y las cooperativas de productores ya han puesto sobre la mesas la problemática que enfrentarían con esta alza, en donde vaticinan que se perdería alrededor de un 20% de los productores de pisco, especialmente los más pequeños, teniendo en cuenta que el rubro no se ha visto fortalecido en los últimos años, debido a la escasez hídrica que han enfrentado en la región, lo cual los está perjudicando en demasía.
El senador Jorge Pizarro se sumó a los cuestionamientos acerca de este punto específico en la ley, afirmando que «he manifestado que si no se corrige en el acápite del incremento de impuesto a los alcoholes, yo voy a votar en contra».
Para el parlamentario, esta medida genera mucho ruido, considerándolo tremendamente dañino para la industria pisquera de la región por una razón muy sencilla, señalando que «lo que sucede entonces es que los piscos son de alta graduación y el esfuerzo que ha hecho la industria pisquera y los productores en los últimos años para poder competir con la competencia que tienen de los productos importados como whisky, ron, vodka, gin, tequila, etc. Que tienen subsidio y no tienen alzas arancelarias por lo que llegan a muy bajos costos».
Pizarro también insiste en el tema de la sequía y los problemas que les ha traído en los últimos años, sobre todo a los pequeños pisqueros –más de 3.000 aproximadamente- organizados en cooperativas con sistemas de producción, comercialización y de gestión cooperados. «Entonces estamos en una realidad que no se puede soslayar desde el punto de vista social y económico», indicó.
La gran debacle que podría ocasionar este aumento es la baja venta del pisco en el comercio y el aumento en los costos para los productores, quienes están preocupados por la sequía y sus consecuencias en los viñedos, que se han visto afectados, con una producción no tan buena como en cosechas anteriores, invirtiendo más en obtener un producto de calidad.
El legislador dijo que ante todos estos problemas que traería el alza, se le ha solicitado a la Presidenta Bachelet, que con el pisco no se aplique la propuesta, que se haga una exención.
El senador va por más y añade que por sobre todo «porque el pisco es patrimonio cultural de todos los chilenos, es un producto emblemático para el país, sirve a la imagen de Chile en el exterior, se produce solo en la Tercera y Cuarta regiones, producto de una ley especial, y nos parece que no corresponde que producto de la necesidad de obtener más recursos para financiar estas otras reformas se vea afectada la producción de los productores de pisco de nuestra región», señalando como defensa para no aplicar el impuesto.
